"Permanecer y transcurrir": un mural y 160 retratos para volver a hablar de femicidios

Las 160 imágenes le ponen rostros a las víctimas de la violencia de género, junto a la frase: "Quisieron enterrarnos y no sabían que éramos semilla". Bajo el nombre "Permanecer y transcurrir", una muestra impulsada por organizaciones de familiares de víctimas de femicidios y la Red de Mujeres del Distrito Noroeste Noroeste, donde está expuesta, busca reabrir la discusión sobre las múltiples violencias que sufren mujeres y diversidades, más aún en momentos de crisis como el actual.

"Estamos en un momento en el que nadie habla de las violencias que sufren las mujeres, está tan naturalizado que es algo que se ve en el momento y nada más, nadie se pregunta qué pasa con esas familias que quedan allí", dice Claudia Barbieri, referente de la Red de Mujeres del Noroeste, convencida de que es necesario "visibilizar tanto a las víctimas como a quienes quedan, sobre todo a los huérfanos esto que nosotras consideramos una pandemia".

En la misma sintonía y durante la inauguración que se llevó adelante el último jueves, Eva Domínguez, integrante de Mujeres de Negro y de Familiares Atravesados por Femicidios, señaló que la apuesta de la exhibición "es concientizar cuánto falta para que las mujeres tengamos un poco más de derechos".

Domínguez fue clara a la hora de señalar que la muestra, que se exhibirá a partir de junio en la Legislatura santafesina y que desde julio rotará por todos los Centros de Distrito de Rosario, busca "poder pensar juntes qué políticas públicas faltan para que no haya más femicidios" y no dejó de decir que "en los contextos de violencia de género se sufre mucha discriminación, mucho abandono y no hay lugares para sostener a víctimas que lamentablemente terminan en femicidios".

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La selección de las imágenes se llevó adelante junto con las familias de las víctimas que prestaron su autorización para la muestra, que se sumaron al mural ya realizado. Y ahora incluso la propuesta fue convocada desde los centros de salud municipales para ser presentada y trabajada en las salas de espera de cada uno de los espacios.

"Estamos viendo la forma de poder llevarla a esos espacios que son más reducidos", explicó Barbieri, y señaló que "la intención es buscar financiamiento para poder imprimir todas las imágenes en un mismo lienzo que pueda trasladarse a las salas de espera y allí salir a armar grupos de discusión en torno a las violencias".

Un escenario crítico

Poner los rostros de quienes fueron víctimas de la expresión más extrema de la violencia machista es además de un homenaje, una invitación a la discusión, a la reflexión y a la sensibilización. Y eso es lo que sucedió tras la inauguración del espacio en el Distrito Noroeste (Provincias Unidas 150 bis), donde la muestra puede verse de lunes a viernes, de 9 a 17.

"Atravesamos un momento donde la violencia recrudeció y lo que más notamos, desde hace un tiempo, es justamente que no se están dando espacios de debate", señaló Barbieri y agregó: "A las mujeres con botón de pánico, las matan; con prohibiciones de acercamiento, las matan; y la perpetua para un femicida no es perpetua porque goza de privilegios".

La referente, que lleva años en el trabajo de prevención y abordaje de las violencias, no deja de señalar también la ruta crítica que tienen por delante las mujeres que llegan a denunciar. "A veces las mujeres tienen la oportunidad de un sólo llamado por hacer y el camino que tienen por delante en la Justicia es demasiado difícil", señala Barbieri, que trabaja justamente en iniciativas para facilitar la denuncia y el acceso a la Justicia.

Además, recalcó como "fundamental" avanzar en el trabajo con los varones. "Pero no sólo con los varones que tienen problemas legales por situaciones y denuncias de violencias -aclaró-; sino con todos los varones: en los clubes, en las escuelas, en todos los espacios. Los varones tienen que saber que tienen un privilegio y que eso termina dañando a las mujeres con las que viven".