El director del Grupo América y del diario La Capital, Daniel Vila, aseguró que La Capital y los rosarinos lideraron "la gesta de trasformar una modesta villa fluvial en esta pujante urbe contemporánea", manifestó que el diario nunca abandonó "el rigor periodístico" y que siempre consideró que "las instituciones son sagradas", y llamó a "celebrar, sin distancias ni rencores ni odios, lo que realmente somos: argentinos".
Vila ofreció un discurso esta noche en la Cena de Gala del 150 aniversario del diario La Capital, en el que destacó que la sentencia de Ovidio Lagos "Las columnas de La Capital pertenecen al pueblo" se puede sintetizar en cuatro premisas: la verdad, la defensa de las instituciones, la independencia económica y la innovación.
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"La independencia económica es lo que permite la independencia editorial", sostuvo Daniel Vila.
Leonardo Vincenti
"Hacemos periodismo pluralista en donde se puede disentir y opinar, pero siempre parados desde el mismo lugar: el rigor periodístico", resaltó, además de indicar que "para La Capital las instituciones son sagradas".
Sentenció que "la independencia económica es lo que permite la independencia editorial", y juzgó que la empresa supo adaptarse a las nuevas tecnologías. "Los cambios lo han mantenido joven y lozano", indicó.
El siguiente es el discurso completo del director del Grupo América y del diario La Capital, Daniel Vila:
"Un siglo y medio. En esta época signada por el vértigo, amante de la instantaneidad, parece increíble concebir ese lapso en la vida de una empresa.
"Todos conocemos las razones de la fundación de este periódico por parte de Ovidio Lagos, el 15 de noviembre de 1867. En una joven república de tan sólo cinco años hacía falta establecer su Capital Federal. La visión geopolítica del general Urquiza quiso que este diario fuera la punta de lanza de un proyecto federal que finalmente se frustró.
"Y tal vez aquel fracaso inicial de hace 150 años fue lo que permitió la unión inquebrantable que se construyó entre el diario precursor de aquel proyecto y su ciudad. Porque la Capital Federal quedó en Buenos Aires, pero la otra Capital, ésta de papel, permaneció y permanece en Rosario. Y juntos, periódico y rosarinos, lograron la gesta de trasformar una modesta villa fluvial en esta pujante urbe contemporánea, que con su puerto se abrió comercialmente al mundo.
Inquietos, exigentes, vanguardistas, creativos, rebeldes, innovadores. Así es el espíritu del rosarino y es el de La Capital, porque lo supo interpretar.
"Su fundador, Ovidio Lagos, grabó a fuego una sentencia que se ha mantenido hasta hoy: «Las columnas de La Capital pertenecen al pueblo». Ese concepto encierra enormes compromisos en el ejercicio del periodismo actual, que los podemos sintetizar en cuatro premisas.
"La verdad. Hoy el mundo discute qué es la verdad. Discute si no ha sido sustituida por la posverdad, o la llamada teoría de los hechos alternativos, que es la materia prima de la posverdad. Los hechos alternativos son mentiras sustentadas en aparatos propagandísticos que permiten que hechos falsos expliquen la realidad y no parezcan mentiras. Nosotros, con aciertos y errores, creemos en los hechos objetivos, los datos duros y las verdades absolutas o relativas. Hacemos periodismo pluralista en donde se puede disentir y opinar, pero siempre parados desde el mismo lugar: el rigor periodístico.
"La defensa de las instituciones. Durante 150 años, nuestro diario ha ejercido una defensa irrestricta de las instituciones. De todas, pero por sobre todo, de aquellas que sostienen la república. Como sabemos, en un siglo y medio en nuestro país hemos vivido todo tipo de situaciones políticas. La historia de La Capital siempre ha sido la misma; para La Capital, las instituciones son sagradas.
"La independencia económica. Cualquier emprendimiento puede tener buenos y malos momentos en su vida económica. Los medios para cumplir su verdadera responsabilidad social, para ser veraces y confiables necesariamente deber ser exitosos y rentables. La independencia económica es lo que nos permite la independencia editorial, base de la confianza que depositan nuestros lectores y el prestigio que nos otorga la credibilidad.
"La innovación. La Capital ha sabido adaptarse a las tecnologías y a los conceptos periodísticos de cada tiempo. Desde la legendaria impresión en caliente, pasando por la composición en frío, del formato sábana al actual tabloide, de la impresión en blanco y negro al color y al rediseño. Del papel al digital. Y tantos otros cambios lo han mantenido joven y lozano.
"En un momento en donde pareciera que la era digital arrasará con todo lo que conocemos, hemos interpretado las nuevas tecnologías y hoy somos el diario on line mas leído del interior del país.
"Pero al mismo tiempo estamos construyendo nuestra nueva planta impresora, que albergará una moderna rotativa para continuar con nuestro diario de papel. El que todos conocemos y leemos.
"Quiero agradecer muy especialmente la presencia del señor gobernador de la provincia, Miguel Lifschitz; del presidente de la Cámara de Diputados de la Nacion, Emilio Monzó, y todas las autorizada presentes. También la enorme cantidad de salutaciones que recibimos con motivo de nuestros 150 años.
"Igualmente agradezco la premiación con que nos distinguió la intendenta Mónica Fein en representación de la Municipalidad de la ciudad de Rosario y a la presidenta del Concejo Deliberante, Daniela León. El próximo 23 del corriente recibiremos una distinción del Senado de la provincia la que desde ya nos enorgullece.
"Y también la presencia de todos ustedes acompañándonos en una noche tan importante.
"Particularmente me quiero referir a nuestros trabajadores. A los que están y a los que estuvieron en estos 150 años. También quiero agradecer a los compañeros de Directorio y socios, José Luis Manzano, Orlando Vignatti y a mi hijo Agustín Vila por por la confianza que han depositado en mi persona durante estos últimos 20 años honrándome con la presidencia de Editorial Diario La Capital. Gracias por la responsabilidad y la confianza.
"Y por supuesto y muy especialmente a quienes son los motores y responsables de nuestra existencia diaria, la razón por la que trabajamos todos los días, que son nuestros lectores. Gracias, muchísimas gracias.
"Si bien es un día de festejo, me gustaría terminar estas palabras recordando una reflexión que hice en el Senado de la Nación en ocasión de la entrega del premio y que tiene que ver con nuestra cruda actualidad.
"Como todos sabemos ayer —hace poco más de un año y medio— festejamos los 200 años de la independencia de nuestra Patria. Hoy nos convocan los 150 años de un diario diario. Ha llegado al hora de que los argentinos nos arremanguemos y nos pongamos a trabajar para que mañana seamos capaces de celebrar, sin distancias ni rencores ni odios, lo que realmente somos: argentinos".