Dos inspectores de la Dirección de Tránsito multaron al chofer de un taxi que estacionó en un lugar indebido, pero con un argumento que encendió la polémica y desató el repudio de quienes observaron la escena. Ocurrió el lunes a la mañana, en Alvear y San Luis, cuando las dos hijas de una mujer no vidente descendieron del taxi en donde se encontraba ella para ingresar al colegio. El taxista dejó el auto sobre la senda peatonal por unos instantes para ayudar al ingreso de las niñas, pero la reacción de los agentes terminó en un procedimiento de media hora. "No era una pasajera convencional, es lo que intenté hacerles entender, pero no hubo caso", dijo el taxista a LaCapital.
Lunes, horario de ingreso escolar. Como todas las mañanas, Hernán Morales pasó a buscar a Teresa, una mujer que perdió la visión hace unos 8 años y se desplaza con bastón. Subió al taxi junto a sus dos hijas, de 12 y 5 años, en el barrio de República de la Sexta. Morales las trasladó hasta el colegio de Alvear y San Luis.
Como cada día, el taxista se dispuso a encontrar un lugar para que las niñas descendieran y las acompañó hasta las puertas de la institución educativa. "No es más de un minuto", explicó el joven conductor. El viaje sigue luego hasta la Biblioteca Argentina Juan Alvarez, donde Teresa se desempeña como administrativa.
Pero el lunes la rutina cambió. El chofer se topó con el inspector 1006 y la agente 957 de Tránsito cuando el Chevrolet licencia 2485 estacionó en lugar indebido a la altura de Alvear 997 y pisó la senda peatonal.
"Ella tiene su bastón y yo le hago la atención de bajarle a las nenas hasta el colegio. No había lugar para estacionar y cuando me detuve los agentes me dijeron que circulara. Les pedí un segundito y le expliqué a la inspectora que mi pasajera es ciega, a lo que me respondió: «Es ciega pero puede caminar». Ella escuchó y se puso mal. Ahí vino el inspector y me hizo poner a un costado para requerirme toda la documentación", explicó Morales a este diario.
Una vez labrada la multa a las 7.50 del 25 de septiembre (por detener el vehículo para realizar descenso de pasajero sobre senda peatonal omitiendo la indicación del inspector, obstruyendo el paso de peatones hacia el ingreso de alumnos al colegio) el chofer les pidió la identificación a los inspectores, a lo que estos agentes accedieron.
"Ahí les expliqué que trasladaba una pasajera no vidente. Se empezó a acercar gente para repudiar lo que estaban haciendo. Se subieron a un vehículo y se retiraron", prosiguió el chofer. El acta agrega que hubo amenazas al inspector y agravios verbales.
"Me siento mal. Fue un procedimiento con abuso de poder y una discriminación a una persona con discapacidad. Estaba con el bastón en la mano. Desde 2000 que estoy con el taxi y es la primera vez que me encuentro con algo así".
El taxista está dispuesto a pagar la multa. "No tengo problema en abonar la infracción, pero considero que esta mujer no vidente merece una disculpa. No contemplaron una situación especial y se los estoy explicando y les digo que son dos segundos. Las nenas bajan con sus mochilas, pero al final terminamos parados 30 minutos", razonó el taxista.
Reacción en redes sociales
La escena descripta por Morales fue observada por un grupo de padres. Por redes sociales, varias madres se hicieron eco de la situación.
"Esta mañana lleve a mis hijos a la escuela, una de las entradas es justo en la esquina de Alvear y San Luis. Me acerco y estaban los de Tránsito discutiendo con un taxista y con una mamá no vidente que estaba dejando a sus hijas en la escuela. La situación ameritaba no ser sancionada. En este tiempo había otros autos en infracción. Son dos personas discriminatorias. Esta mamá no lo podía creer entre lágrimas. Madres y seños los increparon", describió una mamá, que posteó fotos de los sucedido.