En el marco de la segunda semana del Carlito, tradicional sándwich de jamón y queso con ketchup recientemente declarado patrimonio cultural y gastronómico de la ciudad por el Concejo Municipal, ayer se desarrolló otro clásico: la carrera de mozos.
En el marco de la segunda semana del Carlito, tradicional sándwich de jamón y queso con ketchup recientemente declarado patrimonio cultural y gastronómico de la ciudad por el Concejo Municipal, ayer se desarrolló otro clásico: la carrera de mozos.
Munidos de bandejas en los que llevaban un Carlito y un vaso de gaseosa, los mozos de Pellegrini realizaron ayer la competencia en los cien metros que se extienden por esta avenida desde Oroño hasta Balcarce.
Hubo varias carreras eliminatorias donde los empleados gastronómicos mostraron toda su destreza para llevar al trote la bandeja sin derramar una gota o dejar caer un trozo del flamante patrimonio cultural de la ciudad.
En ese marco, Mauro Panero, un joven mozo del bar Club Fellini, de Entre Ríos y Pellegrini, se consagró ganador y se hizo acreedor de un premio de mil pesos.
La segunda semana del Carlito es organizada por la Asociación Civil Paseo Pellegrini con el objetivo de festejar la existencia del tradicional sándwich rosarino.