
Sábado 07 de Agosto de 2010
El arzobispo de Rosario, monseñor José Luis Mollaghan, llamó hoy a “escuchar a los
jubilados y sus reclamos”, durante una homilía tras la procesión por la festividad del
Día de San Cayetano.
“Es necesario escuchar a los jubilados y sus reclamos”, dijo hoy el
religioso.
Miles de fieles participaron esta tarde, aquí, de la marcha religiosa, bajo el lema
“Que a nadie le falte el pan para comer y tu Palabra Bendita para creer”.
La movilización partió poco después de las 15 desde la iglesia en la que se venera al
santo, Buenos Aires al 2100, macrocentro de la ciudad, y terminó en la plaza de la Libertad,
donde el obispo rosarino efectuó una misa.
En su homilía, Mollagham pidió por los abuelos y los niños por nacer y la defensa de la
vida.
En la madrugada habían comenzado las misas en honor al patrono del trabajo. Este año, la celebración tuvo un matiz festivo, ya que Mollaghan declaró santuario al templo que recibe miles de fieles que se acercan cada año a pedir y agradecer.
Desde ayer a la tarde ya habían empezado a llegar fieles y los vendedores comenzaron a armar los 120 puestos en las calles adyacentes al templo ubicado en Buenos Aires 2150.
Las actividades comenzaron con el nuevo día. Justamente, a las 0 de hoy Mollaghan celebró la primera misa en la que dejó instaurado el segundo santuario que tendrá la ciudad, ya que hasta ayer existía uno, la iglesia catedral. Luego habrá una jornada de adoración y se sucederán las misas una por hora. A las 15 comenzará la procesión hasta la plaza Libertad, donde el arzobispo celebrará la misa de cierre, aunque luego continuarán más actividades en el templo de calle Buenos Aires.
Las calles adyacentes al santuario fueron cortadas. Durante toda la jornada habrá atención sacerdotal para las confesiones.
En cuanto al transporte de pasajeros, las líneas 136, 137, 138 y 139 desviaron sus recorridos por Buenos Aires, La Paz, 1º de Mayo e Ituzaingó. Asimismo, las líneas que circulan por Laprida, (112, 136, 137 y 142 R/N), unificaron el ascenso y descenso de pasajeros en Laprida y Cerrito mientras se desarrolló la ceremonia religiosa.
El presidente aseguró que el antiviral denominado Carvativir ya recibió el permiso sanitario oficial