Los "superpoderes", con luz verde en el Concejo
Si bien el oficialismo logró ayer darle despacho al controvertido proyecto que cede, por el
lapso de un año, facultades al intendente Miguel Lifschitz para decidir aumentos de las tarifas del
transporte público (ómnibus, taxis y remises), aún no cuenta con el quórum que garantizará su
aprobación durante la sesión de mañana del Concejo, la última del período ordinario. De todos
modos, la oposición no descarta votar por la negativa o, llegado el caso, retirarse de sus
bancas.
2 de diciembre 2009 · 01:00hs
Si bien el oficialismo logró ayer darle despacho al controvertido proyecto que
cede, por el lapso de un año, facultades al intendente Miguel Lifschitz para decidir aumentos de
las tarifas del transporte público (ómnibus, taxis y remises), aún no cuenta con el quórum que
garantizará su aprobación durante la sesión de mañana del Concejo, la última del período ordinario.
De todos modos, la oposición no descarta votar por la negativa o, llegado el caso, retirarse de sus
bancas.
La delegación en Lifschitz de la competencia de incrementar la tarifa del
transporte de manera automática ante una suba de costos pasó el lunes por la comisión de Servicios
Públicos del Concejo, aunque salió con un cambio: doce meses de duración.
La iniciativa también superó las comisiones de Presupuesto y de Gobierno, pero
en el marco de esta última los ediles Fernando Rosúa (Encuentro por Rosario), Arturo Gandolla y
Osvaldo Miatello, del Frente para la Victoria-PJ, y Daniela León (UCR) la rechazaron con un
despacho de minoría. "Contraviene la normativa vigente y constituye un atropello al funcionamiento
del Concejo", argumentaron.
"Hasta ahora, todo indica que hay tratamiento", afirmó a La Capital el jefe del
bloque oficialista, Manuel Sciutto, para luego insistir en "la necesidad de garantizar el
funcionamiento" de un sistema de transporte inmerso en la crisis.
Mientras tanto, su par de bancada Juan Rivero continuaba bajo atención médica
por un cuadro de estrés. Y nadie se arriesgaba anoche a confirmar su presencia en el Palacio
Vasallo.
El panorama luce complejo para el oficialismo porque tendrá un voto menos: el
arista Carlos Comi asumirá mañana como diputado nacional por la Coalición Cívica. Y no estará en el
Palacio Vasallo.
La pretención de Lifschitz es aprobar el proyecto antes del recambio
legislativo, en función de la paridad de fuerzas que reflejará el nuevo mapa político del
Concejo.
En paralelo a algunos referentes socialistas que se mostraban confiados en poder
avanzar con negociaciones en tiempo de descuento, Gandolla advirtió que "ninguna hipótesis de la
oposición contempla otorgar los superpoderes, es decir, un año de libre arbitrio al
intendente".
Desde la misma vereda, y como al pasar, deslizaron: "Habrá que ver si el
oficialismo logra el quórum propio".
Rivero tenía previsto declarar el lunes próximo en el marco del juicio oral a
los represores de la última dictadura militar (es querellante en la causa Fábrica Militar), aunque
no lo hará por el cuestiones de salud. Por eso los interrogantes respecto de su participación en la
sesión.
En julio de 2008, la presencia de Rivero en el recinto para votar el aumento del
boleto también había sido puesta en duda.
Finalmente, el edil ocupó su banca pero optó por la abstención. Graves
incidentes dentro y fuera del palacio precipitaron el final de la sesión.