Un informe de la Secretaría de Planeamiento municipal puso en números el alza sostenida y la franca recuperación de los permisos de edificación desde los comienzos de la pandemia hasta nuestros días. Para dar un ejemplo del repunte, se conoció que entre enero y noviembre del año pasado se otorgaron 1.355 autorizaciones para construir en la ciudad, lo que equivale a un 55,6 por ciento más respecto al mismo periodo año anterior. Y si se calculan los metros cuadrados autorizados el comparativo refleja un 84,7 por ciento más respecto al mismo periodo (enero-noviembre) del 2020. “Es un repunte de la actividad que marca una tendencia positiva para el 2022”, consideró la titular del área, Agustina González Cid.
En 2021 se acumularon 11 meses de crecimiento consecutivo con respecto del mismo mes del año anterior. Es decir, cada uno de los meses fueron mejores que su par del 2020.
Noviembre pasado, fue el mes en que mayor cantidad de metros cuadrados no residenciales se habilitaron, con espacios comerciales en general y junio fue el mes de mayor cantidad de metros cuadrados residenciales habilitados.
Según el informe del municipio, entre 2019 y 2021, la construcción ha presentado valores muy por debajo de su media histórica. Sin embargo, este período puede fraccionarse en dos tramos, utilizando como punto de corte el comienzo de la pandemia argentina a partir de marzo 2020.
En el primer tramo, tanto los permisos como las superficies autorizadas venían con una tendencia descendente. Dada la cuarentena obligatoria no hubo permisos de construcción durante abril de 2020 y luego, comenzó a incrementarse.
Luego, la cantidad de permisos mantiene fluctuaciones en el último período, pero con una tendencia creciente. En cuanto a las superficies autorizadas, si bien en octubre habían descendido notablemente para ambos tipos de uso, en noviembre los valores repuntan (pasando de 23.925 metros cuadrados autorizados a 60.914 metros cuadrados).
Junio y noviembre
El valor más alto de superficies autorizadas del 2021 para uso residencial se dio en junio y, en lo que corresponde a uso no residencial, el máximo se registró en noviembre pasado.
Para la titular de Planeamiento, Agustina González Cid el mes a mes de 2021 creció notablemente contra el 2020. “Se logró con todos los vaivenes 2021 se trabajó mas constante y se vio reflejado en los permisos. Fue una muy buena recuperación y también percibimos que hay muchas consultas para permisos para este 2021 que ya refleja mas inquietud y hay una expectativa. Creció y parece que seguirá creciendo”, estimó la funcionaria.
Centro y Fisherton
A la hora de explicar el fenómeno, la secreataria de Planeamiento lo atribuyó a distintos factores. “Mucha motorización por la construcción, se recuperó trabajo atrasado del año 2020 pero también se consolidó la expectativa el año pasado como para ir saliendo de a poco de estas etapas complicadas de la pandemia”, indicó.
Y agregó: “Probablemente este crecimiento tenga que ver con un momento donde los precios en relación al dólar eran convenientes y no habían aumentado tanto, muchas inversiones se volcaron a la construcción”.
Y a la hora de determinar los sitios de la ciudad con mayor pedidos autorizados para edificar, el centro en primer lugar por su consolidación y luego el noroeste donde hubo una cantidad muy importante de áreas con lotes para construir.
Agilidad
En cuanto a la promoción de herramientas normativas que desde el Estado hayan cooperado a este aumento, González Cid enumeró los cambios en las alturas de las plantas bajas, modificaciones en los criterios sobre balcones de edificios, y la ordenanza para hacer salones de usos múltiples en las azoteas, entre otras.
“No es que se hagan más inversiones porque hay más proyectos atractivos pero sí se facilitaron trámites y se les dio mayor agilidad”, aclaró. El inversor lo puede hacer on line como por ejemplo los avisos de obra, que antes eran presenciales y se hizo un circuito digital para evitar idas y vueltas en los permisos dentro de las áreas que deben revisarlos.
“La facilidad en los trámites no trae como consecuencia directa más inversión, pero sí agilizamos expedientes en relación a los tiempos que demandan en una revisión o autorización administrativa”, remarcó la secretaria.
El noroeste, el imán para inversiones
Según los registros municipales de los últimos años, la zona noroeste es la que más permisos de edificación tuvo después del centro. Ahora, empezará un debate en el Concejo a partir de un proyecto del Ejecutivo que busca para el casco antiguo de Fisherton reducir la intensidad de edificación y volcar la inversión hacia los alrededores incluso con la definición de cordones con mayores alturas como avenida Jorge Newbery.
En este marco, el Ejecutivo remitió al Palacio Vasallo una iniciativa para regular el sector de Fisherton que consiste en ordenar los indicadores, regular alturas y cantidad de unidades. “Lo que ahora proponemos es preservar el área histórica y dar mayor flexibilidad en otros sectores como Aldea y Hostal del Sol.
Es decir reducir la intensidad en el sector histórico y afuera permitir cantidad de unidades de acuerdo a la cantidad de metros cuadrados del terreno. También se crean corredores donde podría haber más altura y locales comerciales en las plantas bajas. Es una ordenanza general que aborda muchos temas, desde el suelo absorbente hasta las alturas pero ayudará a acomodar esta demanda que hay en esta zona”, razonó la titular de Planeamiento Agustina González Cid.
“El ladrillo fue un refugio”
Para el titular del Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (Cocir) Andrés Gariboldi “tanto el nivel de construcción, nuevos permisos como escrituras se han visto con un crecimiento en todo 2021 con respecto al 2020”. Para el corredor inmobiliario los niveles de escrituración del 2021 han estado por encima de 2019. “El ladrillo fue considerado un refugio. Los costos de construcción han disminuido en dólares, por lo tanto el poseedor de billetes está en condiciones de comprar más metros cuadrados con el mismo monto que en el 2018 y 2019”. Desde el Cocir se consideró que falta una ley que permita desgravar a aquellos que compren y destinen inmuebles en alquiler y crédito hipotecario, ajustable por salario.