Si algunos pensaban que la ola de calor se había terminado, las previsiones para el trimestre que comienza indican todo lo contrario. Los pronósticos elaborados por meteorólogos y organismos oficiales como el propio Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anticipan un mes de febrero con temperaturas superiores a las habituales para esta época y precipitaciones por debajo de las normales. Sin embargo, no hay que descartar fenómenos de abundantes precipitaciones en cortos períodos, por eso habrá que prestar atención a los sistemas de alerta temprana por eventos ocasionales de gran magnitud como ocurrió en la segunda quincena de enero. Las lluvias seguirán siendo escasas y no hay visos de mejoras respecto a la altura del río Paraná.
"Febrero es uno de los meses donde se empieza a transitar el último período de verano. Nos queda mes y medio de una estación que se presentó bastante calurosa en la mayor parte del país. A pesar de eso, con las escasas lluvias en lo que representa en cantidad de días pero sí en cantidad en cortos períodos, se ha recuperado algo de humedad necesaria para poder sobrellevar lo que queda de esta estación", le comentó a La Capital la meteoróloga Vanessa Balchunas respecto a las previsiones para el mes que recién comienza.
Sin embargo, para aquellos que esperaban algo de alivio en cuanto a las olas de calor y abundantes precipitaciones, Balchunas anticipó que la tendencia para lo que queda de este trimestre es que las temperaturas sean de normales a superiores a lo normales. "Esto asegura que las máximas en nuestra zona, que pueden ser entre 32 y 33 grados, tengan un aumento de entre 3 y 4 grados más debido a que hay posibilidades de que se den aumentos de temperaturas u olas de calor durante febrero y primera quincena de marzo. Es por eso que hay que estar atentos al sistema de alerta temprana (SAT) del SMN", detalló.
"Las marcas térmicas se muestran apenas superiores a lo normal, pero algunas regiones pueden llegar a tener temperaturas que denoten una nueva temperatura de calor. Hay que tener en cuenta que enero fue un mes más extremo de la historia por la extrema ola de calor que tuvimos por ser una de las más prolongadas y por los eventos térmicos que tuvimos. Es por eso que el fenómeno de la Niña sigue vigente y recién culminaría en marzo", precisó.
Asimismo, adelantó que las lluvias van a seguir siendo escasas y se registrarán en algún evento de importancia por recambio de masa de aire y que siguen siendo superiores a lo normal y por debajo de lo normal en la Patagonia y en el noroeste del país. "Estas previsiones hablan de las codiciones medias que se estudian a largo plazo, hay que tener en cuenta que el mes pasado hubo singularidades como bloqueos atmosféricos, que generaron esa ola de calor, también tener en cuenta de sistemas frontales para saber si hay variabilidades que puedan ayudar a provocar mayores precipitaciones o descenso de temperatura. Y eso se ve con pronósticos semanales", evaluó.
"A pesar de los extremos vigentes que tuvimos, la Niña sigue influyendo tanto en la distribución y las características espaciales de las lluvias y las anomalías que están previstas para febrero hablan también de que el fenómeno sigue presente y que de manera ocasional puede llegar a darse otro evento de precipitaciones", reforzó.
Por su parte, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), apunta que para los próximos tres meses "se observan regiones donde las previsiones numéricas experimentales de los principales modelos globales de simulación del clima y modelos estadísticos, indican diferencias en cuanto a las probabilidades en el pronóstico estacional". Y agrega que en condiciones neutras del Fenómeno del Niño Oscilación Sur (ENOS) y en zonas sin otros forzantes, "se espera que el comportamiento responda a la probabilidad del 33.3% en cada categoría".
En tanto, desde el Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático y Sistema de Alerta Temprana (SAT), Jorge Giometti, conocido como el cazador de tormentas, pronosticó algo similar respecto al fenómeno climático vigente en la región. "Vamos a continuar con el fenómeno de La Niña por segundo año consecutivo, las temperaturas seguirán por encima de lo normal y las precipitaciones serán escasas por lo menos hasta mediados finales de marzo, donde habría que ver si se revierte a una Niña neutra", apuntó.
También afirmó que el río Paraná "seguirá con alturas bajas por las falta de precipitaciones en Brasil. Y si bien podría elevarse el nivel, va a llevar tiempo que ese caudal vuelva a ingresar a los humedales porque están en un nivel mínimo por segundo año consecutivo".
"Tendremos tormentas aisladas de variada intensidad, seguidas de altas temperaturas y olas de calor para febrero como ocurrió durante enero. Este evento de la Niña, que se da por 2º año consecutivo, lo tenemos previsto hace más de un año", concluyó.