A una semana de la implementación de los carriles exclusivos en el centro de la ciudad, los rosarinos ya se encontraron con las calles San Lorenzo (de Moreno a Laprida), Santa Fe (de Maipú a Oroño), Laprida (de Pellegrini a San Lorenzo) y Maipú (de Pellegrini a Santa Fe) delimitadas con líneas blancas. También aparecieron las dudas de vecinos y frentistas respecto del nuevo sistema. Por eso, la gerenta del Ente del Transporte de Rosario (ETR), Mónica Alvarado, adelantó que el lunes próximo arrancará un operativo de especial de control, que se extenderá durante el primer mes y contemplará un inspector por cuadra.
Una de las sorpresas que se llevaron los vecinos es el ancho del carril destinado al servicio público, frente al angosto andarivel de los vehículos particulares.
Alvarado explicó que "es imposible delimitar tres carriles, por lo cual se mantuvo uno destinado a vehículos particulares -de tres metros- y, en el caso del exclusivo para el servicio público, habrá un mínimo de 3,2 metros".
Luego indicó que "en los exclusivos se demarcará una franja de seguridad de 80 centímetros pegada al cordón para evitar que los colectivos circulen tan pegados a la vereda y a los peatones".
Alvarado advirtió que los particulares no tendrán posibilidad de sobrepasarse, aunque los taxis y colectivos sí podrán invadir el otro carril para adelantarse. Y recordó que los taxis sólo podrán dejar y levantar pasajeros en las calles transversales.
El sistema funcionará de lunes a viernes, de 8 a 20, en tanto que las restricciones para estacionar sobre las cuatro calles se extenderá de lunes a viernes, de 7 a 21, y los sábados, entre las 9 y las 14.
También está previsto un megaoperativo de control, a cargo de inspectores de diferentes reparticiones municipales, durante el primer mes. "El objetivo es que haya un agente por cada una de las cuadras afectadas para evitar infracciones y advertir a los conductores", detalló Alvarado, quien agregó: "Habrá, además, monitoreo a través de las cámaras de videovigilancia instaladas en esos sectores".
Por su parte, el secretario de Servicios Públicos municipal, Pablo Seghezzo, afirmó que "se trata de controles disuasivos", pero fue contundente al señalar que "desde el primer día, si aparecen autos estacionados y sin chofer obstruyendo el carril exclusivo, irán al corralón".
Alvarado recordó que desde el lunes los frentistas "no podrán estacionar ni detenerse frente a sus casas, aunque sí ingresar en los casos en los que tengan cochera".
Los particulares, a su vez, podrán invadir el carril exclusivo para ingresar a playas de estacionamiento o estaciones de servicio ubicadas sobre la derecha.
La funcionaria insistió que el ascenso y descenso de personas sólo podrá hacerse en las calles transversales, aunque reconoció casos excepcionales: personas con discapacidades y con movilidad restringida.
Sobre los giros a la derecha, Alvarado destacó dos excepciones a la regla: Santa Fe y San Martín y San Lorenzo y Laprida.
Respecto de los choferes los de servicios públicos, la funcionaria indicó que se viene trabajando con titulares y peones de taxis y choferes y empresas de colectivos.
Sin embargo, Alvarado señaló que "las próximas semanas se lanzarán spots publicitarios en radio y televisión para llegar en forma más masiva a los vecinos".