Esta temporada es mucho más caro comprar un acondicionador de aire o un ventilador. Los precios se incrementaron cerca de un 40 por ciento y está latente el fantasma de la falta de stock. Así lo advirtió, el referente de la Cámara de Electrodomésticos, Hernán Calatayud.
En el caso de los acondicionadores, “se están entregando, pero con mucho menos volumen”. En ese sentido, el dirigente apuntó que “va a haber menos oferta, por lo que si hay mucha demanda, van a faltar”.
Según Calatayud, “todos los productos, no sólo los de ventilación, tienen un fuerte aumento interanual. Obviamente que eso incluye a lavarropas y cocinas, y en algunos casos los incrementos son superiores al 40 por ciento”.
Como si eso fuera poco, existe la posibilidad que haya faltantes, fundamentalmente de artículos para combatir el calor, en virtud de que aumente la demanda. “Si empiezan a subir las temperaturas, van a escasear”, indicó.
>> Leer más: Bares, restaurantes y comercios solo podrán usar el aire acondicionado con las puertas y ventanas abiertas
Pero ese no es el único motivo. El vicepresidente de la Cámara de Electrodomésticos dijo que “el canal ya venía con poco stock en la temporada pasada, pero eso se estuvo recomponiendo, aunque luego por la situación de crisis que se venía arrastrando y por la pandemia, no se pudo revertir del todo. En definitiva, la conjunción de ambas cuestiones puede provocar problemas”.
Además, “no hay mucha variedad de modelos y marcas entre los electrodomésticos como había antes; los productos importados que estaban viniendo, hoy no están debido a las licencias automáticas y no automáticas”, dijo.
Para el referente, “el problema ahora está en las reposiciones, con 90 días de demora y sin precio cierto”.
De todos modos, los valores actuales están perfilando un público más orientado a la compra de ventilación que de aire acondicionado. “La venta de los acondicionadores se disparó un poco en los días que hizo más calor”, sostuvo. Pero, admitió que “la gente está siendo prudente y si antes llevaba dos acondicionadores, hoy elige uno y le suma un par de ventiladores, para abaratar costos”.
La diferencia es notable: un aire acondicionado estándar (para un dormitorio, por ejemplo) cuesta cerca de 40 mil pesos, mientras que un ventilador puede conseguirse en 4 mil.
Por último, Calatayud opinó sobre los acondicionadores portátiles y se animó a referenciarlos con la pandemia. “En un punto pueden se más útiles, porque obligan a tener un ambiente ventilado (ventana abierta donde se coloca un tubo que despide el calor). Esto permite una renovación constante”, como aconsejan los epidemiólogos.
Y algo más: en el caso de que una persona alquile una vivienda, evitará el pago de la instalación, el retiro y luego, en el caso de tener que cambiar de domicilio, la colocación nuevamente, que también sufrió aumentos y siempre está en el orden del 20 por ciento del valor del aparato.
Los precios no incluyen los materiales, no obstante los edificios nuevos vienen preparados su instalación. Pero, puede haber distintas variables que conllevan costos más elevados.