El relevamiento de las compras de medicamentos en los diferentes hospitales
provinciales realizado por el propio Ministerio de Salud santafesino reveló variaciones de precios
de hasta el mil por ciento. Pero eso no es todo, el estudio también permite ver que los efectores
de salud llegaron a pagar por algunos medicamentos precios "de mostrador", es decir lo mismo que
abonaría cualquier paciente en una farmacia comercial de la ciudad.
La directora de Farmacia de la provincia, Beatriz Martinelli, dijo que "los
números hablan por sí solos" y agregó que "está claro que algún mecanismo está fallando; ya sea el
que provee, el que compra o en forma conjunta". La Cámara de Droguerías explicó la situación en los
"costos financieros que se producen ante la incertidumbre de las fechas de cobro" (ver aparte).
La responsable del área de Farmacia detalló ayer a LaCapital que "los resultados
reflejan las compras realizadas en 20 hospitales de la provincia en un mes tipo y sobre un total de
19 productos que fueron elegidos por ser los que más gastos generaban para los efectores" y
consideró que las razones de la variación de precios "puede darse por distintas causas: desde dónde
se compra, quién fue el proveedor, si la compra fue de urgencia o las características de la
licitación".
Cifras. Lo cierto es que la funcionaria reconoció que los números "hablan por sí
solos". La dispersión de precios detectada por la provincia varía del 48 por ciento en el caso de
la solución fisiológica —se pagó 2,80 pesos en un hospital y 4,15 en otro— hasta el mil
por ciento para la droga diclofenac, donde entre hospital y hospital el precio pasó de 1,19 pesos a
13,5 pesos.
De hecho, LaCapital detectó que en el listado de medicamentos evaluados por el
Ministerio de Salud hay algunos casos donde los precios que se pagaron son los mismos que los que
están vigentes en los mostradores de las farmacias, con precios consultados a través del propio
Colegio de Farmacéuticos de Rosario.
Así, hubo efectores que llegaron a pagar 4,15 un suero fisiológico por 500
mililitros que en una farmacia comercial puede comprarse abonando entre 4 y 5 pesos. Lo mismo
sucede con la solución dextrosa por 500 mililitros para la que el Estado desembolsó 9,10 pesos y
que en mostrador cuesta entre 4,46 y 9,96 pesos.
Otro caso en la lista de diez que hizo pública la cartera sanitaria es el de la
albumina serica humana que la provincia pagó hasta 269 pesos y que en los precios de lista de
farmacias aparece en sus versiones más económicas a 248 pesos y puede llegar a los 530 pesos. Y
finalmente quizás el más representativo es el diclofenac: por una ampolla de 75 miligramos los
hospitales llegaron a pagar 13,5 pesos cuando en la farmacias una de las versiones más caras es la
caja de seis ampollas a 51,58 pesos, es decir 8,5 cada unidad.
Fallas. Para Martinelli, tanto la compra centralizada como la descentralizada
tiene "ventajas y desventajas", aunque aclaró que en la medida de lo posible "hay determinados
insumos que por su uso frecuente pueden ser comprados a mejor precio y negociando mejores
condiciones si se adquieren a economía de escala y evitando así situaciones de especulación".
Aunque aclaró que "eso exige al mismo tiempo sistemas de distribución eficaces porque de nada sirve
un buen precio si no llega el medicamento en tiempo y forma".
Sin embargo, la funcionaria provincial afirmó que los números del estudio
muestran que "algo está fallando en los mecanismos que están funcionando actualmente".
Si bien sostuvo que no puede hablar de falta de trasparencia, consideró que
"fallan los compradores, los proveedores o ambos, porque si el precio es tan alto la pregunta es
por qué lo pagan; salvo que se trate de un insumo crítico".
Así, insistió en que "hay cosas que deben corregirse" y "no pueden darse
diferencias de hasta el mil por ciento" como las que detectó el estudio".