Operarios de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) trabajaron durante la jornada de ayer para solucionar los cortes generados por la tormenta del domingo. Según indicaron desde la empresa, al cierre de esta edición, persistían algunas interrupciones del servicio por problemas en la red de baja tensión. "Casos puntuales que están en vías de reparación", apuntaron. En las redes sociales, los usuarios se quejaban por lo prolongado de los cortes.
La intensa lluvia desatada durante la madrugada del domingo había producido desperfectos en siete subestaciones que habían quedado inundadas. Tres de ellas, afectaron particularmente el servicio en el centro de la ciudad, según indicaron desde la prestadora del servicio eléctrico. Una de las subestaciones dañadas fue la del cruce de las peatonales.
Desde la EPE destacaron que ese mismo día un equipo especial de montaje cumplía con un circuito de cabinas a desagotar desde las primeras horas de la mañana. También se sumó personal a las tareas de reparación de la red aérea para responder a los trabajos puntuales en baja tensión.
Voceros de la firma explicaron ayer que todos los problemas en la red de media tensión quedaron resueltos sobre el mediodía. Los cortes que se prolongaron más horas obedecían a problemas "puntuales" de la red de baja tensión, indicaron.
Más de 10 horas
Los cortes producidos durante la tormenta del domingo afectaron sectores del microcentro, parte de los barrios del Abasto, Luis Agote, un sector de Pichincha y de barrio Martin.
En algunos casos, la falta de suministro se extendió durante más de 10 horas, tal como lo manifestaron los usuarios que se manifestaron en las redes sociales y a través del WhatsApp de la redacción de La Capital ( 54 9 341 2550763).
El dueño de un almacén de Juan Manuel de Rosas al 1100 contó que se quedaron sin servicio durante la mañana del domingo. Y, hasta ayer al mediodía, la luz no había vuelto.
El corte le significó importantes pérdidas de mercadería: unos 20 mil pesos en carne y lácteos que terminaron en la basura.
Tal como mostró el móvil de El Tres, las góndolas del comercio estaban vacías y se había juntado en una bandeja la carne que se debía tirar. Yogures, cartones de leche, manteca y otros productos que sufrieron el corte de la cadena de frío, también siguieron el mismo camino.
Los vecinos de la zona de Ovidio Lagos y 9 de julio también sufrieron cortes que se prolongaron hasta ayer a la mañana. Es más, por la noche, ante la falta de respuestas de la Empresa Provincial de la Energía decidieron llevar el reclamo a la calle.
La zona afectada se extendía entre Callao, Zeballos, Ricchieri y 9 de Julio, incluyendo el pasaje Monroe.
Desde la Empresa Provincial de la Energía indicaron que esos desperfectos se habían solucionado sobre el mediodía.
Los cortes de suministro que persistían se debían a problemas en la red de baja tensión.