Esta situación no es nueva, puesto que ayer se vivió una situación similar en el aeropuerto de Fisherton cuando el avión que debía despegar a las 14 hacia Punta terminó saliendo de la terminal aérea alrededor de las 22.
El inconveniente, del que no fueron informados convenientemente en su momento, despertó la ira de los pasajeros que debían viajar ayer y hoy, quienes habían programado ese viaje para pasar el fin de año en la costa uruguaya.
Hoy, incluso, un representante de la empresa sufrió una agresión de parte de un hombre que le reclamó por el incumplimiento del vuelo y le exigió explicaciones.
Al parecer, el responsable les ofreció reprogramar el viaje para la próxima semana, lo que despertó aún más la indignación de los presentes.
Además de la incertidumbre por saber cuando partía su vuelo programado de las 14, los pasajeros debieron tener que permanecer encerrados en una sala del aeropuerto de Fisherton que no contaba con aire acondicionado o no estaba encendido, ya que al haber realizado Migraciones no pudieron acceder al resto de las instalaciones de la estación aérea como el bar o los baños.
Con el correr de las horas y la falta de información, sobre todo para saber si se trataba de un desperfecto en la máquina o algún otro provocado por la sobreutilización del servicio, la indignación y el malestar fue subiendo de tono hasta que pasadas las 20 apareció la nave y los viajeros pudieron embarcar hacia la Perla del Este con casi siete horas de demoras respecto al horario estipulado.