Incidente en Club Brown: "Nos decían que fuéramos a llorar a la Municipalidad"

"Primero nos dejaron fuera de la cola y nos tuvieron bastante tiempo esperando. Después, nos dijeron que no podíamos entrar porque estaba lleno y hasta se burlaban y nos decían que fuéramos a llorar a la Municipalidad", recordó ayer Julián García, quien acompañó a un joven discapacitado motriz al recital del músico Skay Beilinson y la semana pasada denunció en el Concejo Municipal el trato discriminatorio sufrido en el boliche donde se realizó el show, Club Brown. El productor del espectáculo, Gustavo Granato, se mostró "sorprendido" por el relato del muchacho y sostuvo que la demora en el ingreso "fue porque estaba con un acompañante y ninguno de los dos tenía entradas".

Julián García tiene 20 años, es periodista y amigo de Nahuel "de toda la vida". Por eso, dice, no quiso dejar pasar "el mal trato" que ambos pasaron el sábado 9 de agosto, cuando los encargados de seguridad del boliche les impidieron acceder al show del ex guitarrista de Los Redonditos de Ricota. "Nos decían que las entradas estaban agotadas y el lugar lleno. Nos dejaron con la silla a un costado de la cola y recién nos permitieron entrar cuando la gente que estaba en la fila empezó a preguntar por qué no lo dejaban pasar a Nahuel", advirtió el muchacho.

Según sostuvo, cuando ingresaron pudieron comprobar que el local estaba "bastante lleno". Sin embargo, eso no impidió que "sobre la mitad del show abrieran las puertas y dejaran entrar a muchísima más gente que no tenía entradas".

La denuncia del joven llegó la semana pasada al presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini, quien pidió la intervención de la comisión de Derechos Humanos para que estudie el caso. "Debemos constatar si realmente se producen estos hechos que, según cuenta el denunciante, es muy grave. En lo tiempos actuales de la sociedad es inconcebible que se produzcan casos de discriminación. La respuesta debe ser urgente, no para nosotros sino para el damnificado y la sociedad entera", explicó.

Sin tickets. A su turno, el productor de Club Brown negó el incidente. "Estoy sorprendido porque nos involucran en un caso de discriminación y en Club Brown no discriminamos a nadie", señaló Granato y circunscribió el problema a una "demora en el ingreso" ya que las entradas al show estaban agotadas.

"No hay una ordenanza, ni ley provincial ni nacional que diga que las personas con capacidades diferentes tengan que ingresar gratis a un espectáculo. A pesar de eso, aplicamos siempre el sentido común y lo dejamos pasar. Le dijimos que espere un momento porque estaba todo agotado y lleno, pero después lo hicimos pasar a él y al acompañante y pudieron ver el recital", apuntó. Y agregó: "No entiendo dónde reside la discriminación porque tuvimos buena voluntad dejándolo pasar".

festejo en barrio belgrano