Los máximos responsables de la empresa Apolo SA fueron imputados hoy por los delitos de estrago culposo agravado y lesiones graves culposas por la explosión de la caldera que se registró el pasado 27 de julio de 2016 en la planta que poseía la firma en Alem al 2900 y que causó heridas al personal que se encontraba trabajando y daños en el laboratorio.
Ariel Fernando García, Marcelo Daniel Ferre y Damián Roberto García, quiente ocupaban cargos gerenciales en la empresa, y Marcela Fernanda Vozza, quien era la presidenta del directorio, deberán afrontar el juicio por el estallido que afectó no sólo a las instalaciones del laboratorio sino también a una vivienda aledaña y a sus moradores.
Así lo dispuso el juez Luis María Caterina, quien aceptó la calificación legal que propuso el fiscal de Homicidios Culposos, Walter Jurado. También se pidió la inhibición general de bienes, la prohibición de la salida del país y la comparecencia quincenal. No se pidió la inhibición para impedir el comercio.
"Los delitos fueron estrago culposo agravado y lesiones graves, a los cuatro imputados se les atribuyó el mismo delito en calidad de autores", detalló Jurado hoy al cabo de la audiencia que se llevó a cabo esta mañana. "Se hizo hincapié en las funciones que ellos tenían en cuanto al uso de las calderas", detalló.
"Lo que se expuso es que en su momento lo que había que hacer ensayos periódicos en las calderas, conforme a la normativa provincial, y no se hizo, y eso está a cargo de los propietarios, poner gente capacitada e idónea para el manejo de calderas y tampoco se hizo y son obligaciones que manda la ley", explicó Jurado.
Hasta ahora el único acusado por esta explosión es el jefe de mantenimiento de le empresa, y que durante el desarrollo investigativo la Fiscalía presume que el siniestro que causó cinco heridos graves y destruyó dos casas linderas, se dio por un "descuido humano" en la aplicación de las normas de seguridad, que produjo una falla en una de las calderas.