"Hay que animarse a pedir ayuda"

"Una sociedad que conozca sus derechos para poder reclamar", esa es la base del trabajo que la titular del Centro de Asistencia a la Víctima de Delitos Sexuales y Violencia Familiar, Mariel Arévalo, lleva adelante. Y no es poco, ya que la policía y especialista en este tipo de denuncias indicó a La Capital que la oficina realiza entre 70 y 80 intervenciones mensuales.

  "La recomendación a las mujeres es que deben animarse a pedir ayuda, no quedarse con la idea de que va a ser en vano. Porque lo que acá podemos prometerle es una respuesta ante su problema", aseguró Arévalo, quien señaló que en los últimos tiempos se "incrementaron las intervenciones y las exposiciones de las mujeres, también porque hay más que se animan a denunciar".

  Al referirse al caso puntual de la golpiza que recibió Analía S., la responsable de la también llamada comisaría de la mujer indicó que "en situaciones de este tipo, donde hay un camino judicial recorrido y hay sobre el hombre una exclusión del hogar, las mujeres deben tomar precauciones, sobre todo evitar el contacto".

  Además, señaló que "una medida judicial para que el hombre no se acerque, no garantiza que haya un cambio de actitud. Entonces, las mujeres deben tomar algunas medidas de recaudo. Eso es, impedir por todos los medios que se acerquen a la casa y si bien entendemos que son situaciones límites y finalmente se acerca, las mujeres deben gritar y llamar inmediatamente a la policía para notificar la situación. Esa es su defensa".