Por Hernán Lascano
Leonardo Vincenti
La cuarentena dejó con muy pocos viajes a los taxistas y ahora buscan agregar actividades.
Distintos órganos de la seguridad pública siguen con atención los aprontes de una concentración de taxistas convocada para hoy en Rosario. Debajo de un planteo legítimo, los problemas de subsistencia que genera la inactividad para un sector que depende de ingresos diarios, aparecen otros que enfrentan niveles sindicales de los choferes, en especial una facción pequeña pero consistente a la que en las mismas agencias penales atribuyen lazos con organizaciones criminales. Por ese motivo desde el gobierno provincial encomendaron a la Agencia de Investigaciones Criminales (ex PDI) un seguimiento muy estricto de los preparativos de la marcha, así como un control exhaustivo de parte de fuerzas de seguridad en el caso de que se concrete.
La concentración convocada en redes sociales y grupos de WhatsApp fue captada por distintas áreas de inteligencia del Ministerio de Seguridad y del Ministerio Público de la Acusación (MPA) de Rosario que nuclea a los fiscales. Llama a reunirse a las 9 frente a la Intendencia y el Concejo y marchar luego a la Gobernación. La iniciativa reconoce la fuerte afectación que el parate produce en los taxistas. Sin embargo un grupo de choferes que quedó fuera del Sindicato de Peones de Taxis al perder la conducción Horacio Boix fue identificado entre los impulsores de la concentración. Se trata de individuos que, según fuentes del gobierno y del MPA, formaron parte del entramado de cobranzas extorsivas a sindicalistas y comerciantes organizadas por el líder de la Banda de Los monos, Ariel "Guille" Cantero, que exigían sumas de dinero a cambio de protección, contra personas que eran blanco de balaceras en caso de no pagar.
La movilización tiene además este ingrediente, que ya salió a la luz en una audiencia imputativa, la del asesinato de un hombre de 64 años en el casino del 11 de enero. El imputado por esa muerte, Maximiliano "Cachete" Díaz, está acusado de organizar meses antes extorsiones contra taxistas para Los Monos.
Narcomenudeo
Sobre la crisis indudable que genera la inactividad es, según fuentes gubernamentales, donde se monta el problema de la interna del sindicato de peones que se venía dirimiendo entre Boix y sus adversarios que hoy conducen el gremio. Sobre esto las agencias penales ubican un gran motivante de conflictividad en el negocio clandestino del narcomenudeo. Esta cuarentena puso en jaque la distribución de sustancias como la cocaína. La dificultad de transitar la ciudad, indican fuentes de órganos de investigación, implica que los consumidores no llegan a los sitios usuales de comercialización de drogas como búnkeres. Allí es donde según fuentes de gobierno y MPA llega un número de taxistas, muy minoritario, para garantizar las provistas como delivery. Lo que además es una salida en un momento en que no hay recaudación.
Fuentes del gobierno provincial señalaron que estos sectores marginales toman provecho del problema genuino que produce la inactividad y que afecta a personas que, en una coyuntura que los perjudica, están interesados en promover la marcha. Indican saber cómo y dónde se produce la organización de la concentración y que sugerirán su posible persecución penal en tanto una movilización rompe con los dictados del decreto presidencial que dispone el distanciamiento social obligatorio. "Nos queda claro que la mayoría de los taxistas tiene un problema enorme que es acuciante. También que hay un núcleo duro minoritario que tiene un acuerdo con sectores criminales que aprovecha esta necesidad", coincidieron fuentes fiscales y del gobierno.
Desesperante
El secretario general del gremio de peones de taxis, Horacio Yanotti, indica que los motivos por los cuales los taxistas desean manifestarse son completamente comprensibles, pero que no puede invitar a la adhesión porque eso rompe con la prohibición de acciones masivas. "Los sectores que dependen de ingresos diarios atravesamos un estado desesperante", dijo a este diario.
"Hoy trabaja el 10 por ciento de los taxis porque no hay viajes. Pero el que no sale no cobra. Sabemos que se está gestionando una marcha pero no podemos convocar ni avalar un acto que está prohibido por la emergencia sanitaria. Estamos insistiendo por la vía institucional con la provincia. Necesitamos que la Ansés provea a todos los peones la compensación al salario de 16.875 pesos, que es como los Repro para las empresas", dijo.
Fuentes de la Intendencia señalaron que habrá una especial atención al problema aunque no se evaluó la procedencia de generar sanciones en tanto la habilitación de chapas es potestad municipal.