El secretario general de los trabajadores municipales de Rosario reclamó ayer el pago de un bono de fin de año, algo que fue enfáticamente descartado por el gobernador Miguel Lifschitz.
El secretario general de los trabajadores municipales de Rosario reclamó ayer el pago de un bono de fin de año, algo que fue enfáticamente descartado por el gobernador Miguel Lifschitz.
En ese marco, y mientras la tensión por los reclamos gremiales crece, la CTA Autónoma marchará esta tarde junto a la multisectorial para exigir el pago del bono y la apertura de las negociaciones paritarias.
Así, las primeras determinaciones del gobierno nacional generaron un tablero político, económico y social bastante agitado en el que los representantes de los trabajadores expresan claramente sus necesidades de cara al cierre del presente año y el inicio del próximo.
Lifschitz desestimó la chance de que el gobierno provincial otorgue un bono de fin de año, en consonancia con la postura del Ejecutivo nacional. Este contrapunto promueve un escenario de negociaciones que no será sencillo en las próximas jornadas.
"Nos sumamos al resto de los gremios estatales con el pedido del pago de un bono por el resarcimiento económico por el desfasaje en relación a la política salarial", apuntó el secretario general del sindicato de trabajadores municipales de Rosario.
En el mismo sentido se exhibieron otros referentes de la Comisión Intersindical del Sector Público. Ratner reveló que para pedir el bono se reunirá con los integrantes de la Intersindical estatal. "Todos los que pertenecemos al sector público vamos a hacer el pedido en conjunto a la gobernación de la provincia. Y a la respuesta la vamos a evaluar el miércoles en un plenario que se hará en Santa Fe".
Más allá de estos pedidos de las organizaciones gremiales, Lifschitz no dio lugar a la solicitud del bono y manifestó que todos los esfuerzos están dirigidos en este momento a garantizar la efectivización de sueldos y aguinaldos. "A esta altura del año es absolutamente inviable pensar en otro tipo de situaciones, como un pago excepcional", explicó el gobernador de manera taxativa.
El mandatario santafesino advirtió que su posición va en consonancia "con la respuesta que se ha planteado a nivel nacional a través del presidente Mauricio Macri".
"En la provincia venimos con dificultades, hicimos un gran esfuerzo para poder ordenar los recursos y poder pagar el aguinaldo en término antes de Navidad, y para poder pagar correspondientemente los sueldos de diciembre en los primeros días de enero", explicó Lifschitz.
Y agregó: "No sólo eso, también estamos asistiendo y ayudando a una serie de municipios y comunas que tienen serias dificultades salariales, ya que no queremos ese conflicto en ningún lugar de la provincia. Así que estamos haciendo un esfuerzo adicional para eso".
Con la misma tónica se expresó Gonzalo Saglione, ministro de Economía de Santa Fe. "No tenemos en nuestra planificación financiera un bono de fin de año, y hoy no estamos en condiciones de pagarlo. Esto no va en desmedro de la legitimidad del reclamo gremial, pero la provincia no está en condiciones financieras de absorberlo", afirmó el funcionario.
Y amplió: "Lo único que podemos plantear es que en otros años hubo bonos de fin de año porque la paritaria había sido diferente a la de 2015. Las paritarias de este año se situaron por encima de la inflación, y eso nos pone en una situación diferente. La prioridad del gobernador fue pagar el aguinaldo antes de las fiestas, lograr un cronograma de pago razonable con los proveedores y garantizar que los municipios y comunas puedan cumplir con el pago de sueldos y aguinaldo".
Paritarias, antes. Con la misma intensidad, el sindicalista Ratner comentó que se elevó un pedido al gobierno provincial para que se convoque "en forma urgente a paritarias", para tener una "rápida discusión del salario, porque los primeros meses del año que viene van a ser muy difíciles".
El dirigente manifestó que "tenemos el compromiso de que la primera reunión por las paritarias se hará a mediados de enero, cuando habitualmente se hacen a fines de febrero, o principios de marzo".
Ratner se encargó de destacar que los trabajadores "vienen con un salario atado a febrero de este año, y ya ha sido desbordado. Por un lado por la inflación, que creo que va a cerrar diciembre entre un 33 y 35 por ciento, sujeto a una política de ajuste tarifaria que vamos a tener todos los trabajadores a partir del 1º de enero, y también por la competencia de la devaluación, que se va a sentir en los salarios".
El gremialista anticipó que se desarrollará un calendario de paritarias "bastante complejo", y por eso "queremos empezar cuanto antes para poder recomponer el salario".
Nuevos acuerdos. En relación a esta discusión paritaria, Lifschitz mostró un panorama algo más alentador y conciliador. "Creemos que a principio del año próximo habrá que volver a conversar, con perspectiva de futuro, sobre los nuevos acuerdos salariales. No falta mucho para eso", aseguró.
En tanto, remarcó que aún restan anuncios por parte del gobierno nacional, y que se encuentra "a la expectativa de qué es lo que irá sucediendo con la economía".
Sobre el desarrollo de las paritarias, Lifschitz deslizó que ve "dificultoso que en el mes de enero podamos comenzar las reuniones paritarias, podemos tener encuentros informales, de hecho ya los hay. Lo positivo es que ya hay diálogo entre distintos sectores de las organizaciones sociales, el sector público, y también el sector privado".
Marcha de CTA
Hoy, a las 17.30, la CTA Autónoma, junto a la multisectorial y otros sectores gremiales, se movilizará exigiendo un bono de emergencia de fin de año para todos los trabajadores. La marcha partirá de plaza Sarmiento hacia la Bolsa de Comercio. Los reclamos se unificarán bajo una consigna: “No al ajuste. Bono de emergencia, ya”.
Por Javier Felcaro