Por Eugenia Langone
Francisco Guillén
Cuando al mediodía se abrieron las puertas del centro de convenciones Metropolitano una decena de personas ya esperaba para ingresar y ver en detalle los vehículos que hoy serán parte de la tercera subasta de bienes que fueron decomisados a organizaciones delictivas. La actividad será, a las 17, a través de la Agencia Provincial de Registro, Administración y Destino de Bienes y Derechos Patrimoniales (Aprad). Curiosos, mecánicos, revendedores e incluso interesados de otras provincias, del sur y el norte del país, se acercaron a los galpones de Junín 501, revisaron motores, preguntaron detalles y, sobre todo, se aseguraron que, de adquirir alguno de los vehículos, se registrarán con un nuevo dominio.
"La expectativa es muy buena", dijo el secretario de Gestión Pública de la provincia, Matías Figueroa Escauriza. Es que son más de mil los inscriptos para participar hoy del remate. "Esta vez, a diferencia de las anteriores, la gente se animó a venir a ver los vehículos desde el primer momento, cuando en otras oportunidades eso se dio más al final".
Con la inscripción impresa y el documento de identidad en mano, condición excluyente, los interesados llegaron desde diferentes puntos de la ciudad, pero también desde localidades bonaerenses y santafesinas, e incluso había inscriptos de El Bolsón y de San Salvador de Jujuy.
"Vinimos desde El Bolsón especialmente para esta actividad", comentó un hombre, que se subió al Porsche Boxter incautado en septiembre de 2017 en un estacionamiento de Avellaneda al 2100 en el marco de la llamada megaestafa inmobiliaria que se investiga en los Tribunales provinciales.
Además de las condiciones de los vehículos, fundamentalmente el estado mecánico, los trámites y las situaciones registrales son los temas que más preocupan a los interesados. "Lo que más pregunta la gente es si los autos salen con una historia registral nueva", explicó Sofía, una de las integrantes del equipo del gobierno provincial que estaba en el lugar asistiendo a quienes se presentaron.
Así, además de asegurarse que cada auto tendrá un nuevo dominio tras la subasta, muchos preguntaron sobre las causas de procedencia, pero sobre todo el modelo, los kilómetros recorridos, si tienen o no llave, y cómo se lleva adelante la transferencia.
Otra incertidumbre para muchos fue saber a cuánto puede dispararse el precio de base, que está planteado un 40 por ciento por debajo del de mercado, algo que todos indicaron no se puede saber hasta el momento mismo de la subasta y de la puja, dependiendo de la cantidad de personas que haya detrás del mismo vehículo.
Motores encendidos
"Te tenés que fijar si te da o no el número", fue una de las frases que se escuchó entre los consejos que los mecánicos daban a los interesados, mientras levantaban los capots para revisar los motores, chequeaban los kilómetros, el estado de las cubiertas y los rayones, e incluso abollones, que pudieran tener las carrocerías.
"Algunos están bien, pero otros son autos muy castigados", aseguraron dos jóvenes que dijeron estar allí por "pura curiosidad" y "a la caza de una oportunidad".
Otro de los hombres admitió que "los precios de base son buenos", pero señaló que "después hay que ver en el remate hasta dónde llegan".
Lo cierto es que todos ayer pudieron ver los autos, así como también se exhibieron tres motos, dos camionetas y un camión. Las visitas, con inscripción previa, continuarán hoy hasta las 17, que es el horario en que está previsto el inicio de la subasta. Allí, la expectativa de la provincia es "que todos los rodados sean vendidos como sucedió en las oportunidades anteriores", recalcó Figueroa Escauriza.
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