Desde que comenzaron los operativos conjuntos con fuerzas de seguridad provinciales y federales el Ejecutivo contabilizó unas 3.300 motos remitidas al corralón en 45 días. Los resultados se intensificaron desde que la policía quedó facultada para detener vehículos y requerir documentación, al igual que las fuerzas federales en el territorio. El dato no es menor si se tiene en cuenta que los operativos se intensificaron el zona de la city bancaria, sector de la ciudad donde este tipo de rodados se utiliza para hacer salideras y arrebatos a clientes que emergen o ingresan a las entidades.
Según el reporte de la Secretaría de Control Municipal, desde junio a la fecha más de 1.300 motos fueron remitidas al corralón como resultado de los operativos diarios desplegados por los agentes de proximidad municipales en zonas calientes, junto a la policía santafesina, Gendarmería Nacional y Prefectura y Policía Federal.
A ello se le agregan otras casi 2 mil motos incautadas en operativos diurnos en el centro, macrocentro y diversos barrios; a los que se suman redadas por las noches con el apoyo de Gendarmería.
Desde que cobró impulso el Comando Conjunto que impulsa un control preventivo de motos, vehículo utilizado en la mayoría de los delitos predatorios como robos y arrebatos, los operativos se intensificaron.
Más aún con la entrada en vigencia del decreto provincial que facultó a los uniformados santafesinos a solicitar documentación sobre vehículos, verificar datos e incautar rodados en infracción, además de aquellos que contaban con pedido de captura por algún delito. La Municipalidad adhirió a esta normativa en junio.
Es así que desde entonces y según datos de la Dirección de Control de Proximidad se realizaron 5.296 controles en la vía pública y en ellos se remitieron 1.302 motos al corralón en el marco de operativos programados en “zonas calientes”.
Esos operativos se programan uno con la policía de Santa Fe, al atardecer, y otro con fuerzas federales al comienzo de la noche. Y los sábados, domingos y feriados se realiza un operativo por día con Prefectura Nacional en el sector costero.
En detalle
En tanto, la Dirección de Tránsito efectuó desde junio al 18 de agosto 6.820 verificaciones de documentación en la vía pública. En ellos se remitieron al corralón 1.954 motos.
En estos operativos se trabaja conjuntamente con la policía a razón de tres controles diarios, de lunes a viernes: uno de mañana en microcentro, uno de tarde en macrocentro y uno de madrugada en zona sur y sudoeste.
De lunes a viernes las tareas de control se hacen en conjunto con Gendarmería con una acción diaria en zonas calientes por la noche (barrios Rucci, Parque Casas, Larrea, Empalme, Ludueña, Tablada, Triángulo o Godoy, entre otros).
A su vez, sábados y domingos se realizan dos operativos diarios, uno con Gendarmería a la noche en sectores conflictivos y otro con la policía durante las madrugadas.
La Unidad Regional II tiene registrados desde la vigencia del decreto que les permite a los policías solicitar documentación 697 motos que fueron retenidas en unos 87 procedimientos. Además, desde enero a la fecha se recuperaron unas 450 motos que tenían pedido de captura.
Por otro lado, el Ministerio de Seguridad de la Nación tiene contabilizados desde el 6 de mayo al 18 de agosto pasado con las fuerzas de tareas Rosario (unos 500 agentes federales) casi 3 mil motos controladas, las que desde enero a la fecha ya habían alcanzado unas 34 mil verificadas. Pero según el reporte nacional, solo 49 fueron incautadas.
El gobernador Omar Perotti firmó a fines de marzo el decreto que le amplía facultades a la policía provincial para realizar controles en motos por fuera de los operativos que se suelen hacer con agentes municipales, pero la adhesión en Rosario demoró en unos meses.
Se trata de un rodado que ya había sido apuntado por los fiscales como el que suele utilizarse para realizar arrebatos en la vía pública, de allí que empezó a extremarse el control sobre los mismos.
La iniciativa surgió de las mesas locales de seguridad. En ese ámbito se había dado cuenta de que en el 70 por ciento de los delitos predatorios, los delincuentes huían en moto.