A dos días de conmemorarse el primer aniversario de la tragedia más grande que vivió la ciudad, con la explosión de un edificio en Salta 2141 y la muerte de 22 personas, el temor volvió a adueñarse del mismo barrio. En la madrugada de ayer, un fuerte estallido sacudió a los vecinos de Salta al 1900. Un cortocircuito en un cable de media tensión, producto de una filtración de un caño de Aguas Santafesinas Sociedad Anónima (Assa), generó la voladura de parte de la vereda, humo, la evacuación preventiva de algunos edificios y 25 mil clientes de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) se quedaron sin servicio.
Todo sucedió cerca de las 0.30, cuando una fuerte explosión sacó de la cama a quienes ya dormían y alteró el vecindario.
A los pocos minutos, en la cuadra de Salta entre Moreno y Dorrego comenzó a verse humo muy cerca del Hotel Holliday Inn Express.
"Escuchamos y un ruido y pensamos lo peor", dijo un estudiante que vive en uno de los edificios de la cuadra en clara referencia a la tragedia que sacudió el mismo barrio un año atrás.
No fueron pocos los que empezaron a bajar presurosos de sus departamentos por las escaleras mientras comenzaron a escucharse las sirenas de los servicios de emergencia que acudían al lugar a atacar el siniestro.
Si bien fueron pocos minutos y algunas torres aledañas al sector de la vereda que había explotado fueron evacuadas, los servicios de emergencia detectaron con rapidez que el problema había sido la explosión de un cable subterráneo de media tensión de la EPE, que se abocó a solucionar el desperfecto.
Según detalló la vocera de la empresa, Diana Antruejo, las cuadrillas trabajaron en el lugar y hacia las 5.26 de ayer realimentaron el cable y le devolvieron el servicio eléctrico a una vasta zona que había quedado a oscuras: desde Pueyrredón a Maipú, y desde Rioja al río.
Las causas. Si bien la empresa repuso el servicio unas cinco horas después de la explosión, las cuadrillas de operarios de la EPE siguieron trabajando con el objetivo de detectar qué era lo que había producido la falla.
Así, hacia las 9 de la mañana y mientras se abocaban a las tareas que tenían por objetivo realizar la reparación definitiva de la avería que dejó a oscuras a 25 mil usuarios de la empresa, detectaron que los cables estaban humedecidos producto de la pérdida de un caño de Assa.
"Esa pérdida generó un cortocircuito que sacó de servicio un cable de media tensión que conecta a dos subestaciones. Al entrar en contacto con el agua, el cable directamente explotó", detalló Antruejo.
Así las cosas, hacia las 17 de ayer el servicio de media tensión había sido repuesto en su totalidad al tiempo que Assa ultimaba los detalles para solucionar la filtración del caño.
Lo cierto es que el estruendo en la madrugada y el ulular de las sirenas hicieron revivir durante algunos minutos la peor tragedia en la historia de la ciudad. Por fortuna, el desperfecto eléctrico y su posterior explosión no generó víctimas y hubo un rápido accionar de los servicios de emergencias.