La causa que investiga el impactante choque de un automovilista que arrasó una garita del transporte y mató a dos mujeres la semana pasada tuvo un viraje significativo. El juez que interviene en el caso dijo que "se probó de forma preliminar que el conductor se habría desvanecido", confirmó que el test de alcoholemia dio negativo y remarcó que el hombre entregó la licencia de conducir por decisión propia. El magistrado aclaró que le concedió prisión preventiva domiciliaria "porque se trata de una persona que está operada de un cáncer" y que "no representaba peligro de fuga o de entorpecimiento de la investigación".
El juez Javier Beltramone explicó las razones por las cuales no envió a prisión al hombre que el viernes pasado embistió un refugio de colectivo y terminó con la vida de dos mujeres que esperaban el micro en 27 de Febrero y Liniers y otras tres resultaron heridas.
La tragedia conmocionó al barrio Villa Urquiza, donde los vecinos denunciaron falta de controles viales frente a la alta velocidad con la que circulan muchos autos y exigieron la colocación de un semáforo a una cuadra de la esquina del siniestro.
"El automovilista está acusado, según la imputación que formuló la Fiscalía, de homicidio culposo. Eso quiere decir que cometió algo que le puede pasar a cualquier persona", señaló.
La imputación por "doble homicidio culposo" la hizo la fiscal Mariana Prunotto, quien como medida cautelar también solicitó la prisión domiciliaria del automovilista, que fue rechazada por la defensa y el propio magistrado.
Beltramone fue más allá y aseveró: "Lo que se ha probado en esta instancia preliminar de la investigación es que (el conductor) se habría desvanecido como consecuencia de un cáncer. Y a consecuencia de este desmayo perdió el control del vehículo con el trágico desenlace".
Luego contó que el imputado "había sido operado hace dos años para extraerle un tumor en el lóbulo del oído izquierdo. Al ocurrir el accidente, volvió a golpearse la cabeza y tuvo que ser trasladado de inmediato a un hospital, y desde allí aconsejaron que debía ser revisado otra vez por aquella intervención a la que había sido sometido".
Al respecto, el magistrado dijo no tener "la menor duda de que la Fiscalía investigará" por qué razones se le concedió una licencia de conducir a alguien que había atravesado una operación de esas características.
Tras confirmar que los análisis de alcohol y de sustancias tóxicas "dieron negativos", Beltramone advirtió que "para la Fiscalía tampoco significó lo que se da en llamar un caso de conducción temeraria, como ocurre con personas alcoholizadas al volante o que evidencian desprecio por la vida y manejan a una velocidad altamente excesiva a la permitida".
"Este es un caso —continuó—de culpa simple. Más allá de lo espectacular del hecho lamentable en el que murieron dos personas, para la propia Fiscalía no hay indicios de que esta persona haya actuado con dolo".
De esta forma el juez justificó la decisión de otorgarle la prisión domiciliaria al conductor "por 30 días con permiso para ir a trabajar". Y apuntó que, tras recibir la licencia de conducir, se la retendrá por tiempo indeterminado.
Cuando se le mencionó al magistrado que según varios testigos presenciales el automovilista conducía a "altísima velocidad", Beltramone indicó: "Todos eso lo tiene que investigar la Fiscalía. Eso probablemente confirme su situación procesal o la puede agravar. Hasta que uno no tenga esos resultados, tiene que manejarse con lo que tiene en este momento".
Más adelante el juez expuso que aún restan conocerse las pericias mecánicas del vehículo para establecer la velocidad a la que circulaba por 27 de Febrero hacia el este el viernes pasado.
Y puso de relieve que la audiencia imputativa del sábado pasado "fue la primera de varias que podrían producirse, donde se aporten más pruebas y elementos importantes para la causa".
En ese sentido ponderó las características "del nuevo sistema penal de Santa Fe que, probablemente en no más de 60 días, el imputado tenga su sentencia respecto a la imputación que se le hizo por homicidio culposo agravado por el resultado de dos personas muertas y una herida".