El Concejo aprobó ayer el presupuesto municipal y la ordenanza general impositiva. A las 18, y con mayoría reglamentaria (excepto el PRO), ambas medidas obtuvieron luz verde después de negociaciones tan calientes como la actuales condiciones meteorológicas. En ese marco, la tasa general de inmuebles (TGI) sólo aumentará en promedio un 19,5 por ciento, en lugar de la cifra que habría alcanzado si se aplicaba el revalúo propuesto por el Ejecutivo. Justamente, ese recálculo tuvo que ser dejado de lado como prenda de paz para que en vísperas navideñas se lograra el consenso, tan esquivo, durante la semana pasada.
Trabajosa como una filigrana, al final salió la ordenanza general impositiva propuesta por el interbloque formado por el justicialismo, el bloque Radical y el Partido del Progreso Social (PPS). La Municipalidad no tuvo más remedio que ceder casilleros para entrar al 2014 con el presupuesto aprobado bajo el brazo.
Con la consigna de "proteger el bolsillo de los rosarinos", se aprobó la actualización de la TGI sintonizando con la inflación en un 19,5 por ciento de promedio en función de los seis radios tributarios.
De ese modo, el porcentual para cada uno de los segmentos urbanos es el siguiente: 1 (centro) 22 por ciento; 2 y 3 (barrios) 15 y 12, respectivamente; 4 (Fonavi/precarizados) no tendrán aumento; 5 (barrios privados/zonas residenciales) 30 y 6 (Puerto Norte) 36.
Según el portavoz del interbloque formado ad hoc para este tema, el radical Sebastián Chale, el aumento votado regirá en 2014, por única vez y no acumulativo.
Entonces, el 80 por ciento de los contribuyentes rosarinos no pagara más allá de 20 pesos, el grupo de menos que ese monto y quienes viven en inmuebles de mayor valor adquisitivo abonarán el 36 por ciento del monto actual de la TGI.
¿Y el revalúo? "Para nosotros quedó descartado", auguró Chale. Aunque no se sabe si con más deseo que expectativa, ya que a la mañana se había escuchado decir que si bien esa opción se desacoplaba del cálculo para aumentar la TGI, quizás podría comenzarse a estudiarse durante 2014.
"Evitamos un impuestazo del socialismo y su aliado el PRO", fue la síntesis de los concejales Norma López y Roberto Sukerman (FpV), Jorge Boasso, María Eugenia Schmuck y Sebastián Chale (bloque Radical), Héctor Cavallero, María Fernanda Gigliani y Lorena Giménez (PPS), Osvaldo Miatello (Compromiso con Rosario) y Carlos Cossia (Peronismo Solidario). Y aseguraron que desarticularon un aumento de la TGI de entre 35 y hasta 165 por ciento y un revalúo de la propiedad privada que, atada al mercado inmobiliario, hubiese trepado hasta un 800 por ciento.
Pero la oposición así constituida obtuvo un plus. "La eliminación de los superpoderes que tenía el Ejecutivo para disponer a discreción los saldos de los fondos específicos de obras públicas, pavimentos y cloacas. Esto se logró con la modificación de los artículos 12, 13 y 14 del presupuesto.
Lo que viene. Para el concejal justicialista de Rosario Federal, Diego Giuliano, el presupuesto aprobado ayer, al que no acompañó con su voto, "es conservador en materia de inversión en obra pública y ausente en el área de seguridad".
Según Giuliano, uno de los seis votos en contra de las medias votadas, "el presupuesto debería estar basado en la responsabilidad, en la obligación de la Municipalidad de lograr los resultados previstos y rendir cuentas de su gestión".
En el PRO, que sumó los seis votos en contra del presupuesto, alertaron que es necesario "ser más austeros y no seguir sacándole plata al vecino".
La afirmación está en consonancia con la propuesta alternativa que presentó ese bloque el viernes. Y que propiciaba un congelamiento para el ingreso de personal a la Municipalidad y el retiro voluntario, entre otros recortes.
Además, apuntaron nuevamente a un "acuerdo político" entre socialistas, ediles K y el sector del radicalismo que responde a Boasso.
"No pusieron sentido común y aumentaron de manera irresponsable", dijeron, al unísono, los concejales del PRO.
A las 18, cuando los 15 votos a favor de los 21 concejales presentes dieron luz verde al presupuesto y la ordenanza impositiva, hubo aplausos y valoración del consenso.
"Apruebo a pesar de que tengo críticas, pero no se puede dejar sin esa herramienta al Ejecutivo. Eso ya lo sufrí", dijo el Héctor Cavallero (PPS).