Los integrantes de la comisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal mostraron ayer su preocupación generalizada en torno al nuevo aumento de la tarifa en el transporte urbano de pasajeros. "Es un error trasladar en medio de la angustia los costos al usuario. Es injusto castigar a sectores asalariados y además, a mayor aumento menos pasajeros", esbozó el edil peronista Osvaldo Miatello, para quien el congelamiento de la tarifa que hizo la ciudad de Santa Fe en 14 pesos por pasajero es una referencia a tener en cuenta.
"No entiendo por qué el progresismo votó fijar un valor y el intendente de Cambiemos (José Corral) lo aplicará, y acá no se puede", ahondó Miatello.
Para el progresista Pablo Javkin el eje está en la discusión presupuestaria a nivel nacional, ya que según entendió el transporte se sostiene bajo tres ejes: salarios, coches y combustibles. "Espero una solución racional al presupuesto, porque esta curva es insostenible", remarcó.
La edila macrista, Renata Ghilotti, dijo que "se debe estar atentos a cómo se da la aprobación del presupuesto nacional con respecto a la distribución de subsidios y pedirle a la provincia que haga su aporte con recursos propios para no seguir trasladando los aumentos a los usuarios". Sobre el congelamiento tarifario indicó: "Es difícil seguir trasladando el aumento al usuario y sería una decisión de la intendenta, pero siendo responsables, aún hay que ver cómo se aclara el escenario nacional".
El socialista Horacio Ghirardi consideró "complejo congelar tarifas", y advirtió que en Rosario "una decisión así podría quebrar el sistema, que resulta bueno y está enfocado en trabajadores y estudiantes".
Su colega de partido, Verónica Irizar, aclaró que existe un contexto inflacionario que se profundizó en la última semana de agosto.
"Cuando modificamos la ordenanza tuvimos en cuenta la necesidad de sostener el sistema en funcionamiento pese al aumento de la inflación. El ajuste para este trimestre es de un 13,6 por ciento mientras que, por ejemplo, la variación del tipo de cambio fue del 42 por ciento en el mismo período (tercer trimestre 2018). Nadie quisiera estar en esta situación, pero es la consecuencia del contexto. Tuvimos en cuenta el aumento de la nafta, las paritarias y el valor de las unidades", dijo.
Irizar, en línea con sus colegas, se mostró cauta pero preocupada. "Vamos a esperar a las nuevas medidas y a ver si el dólar se estabiliza", auguró.