Dos obreros murieron ahogados esta tarde cuando se inundó la zanja en la que trabajaban para una extensión de red cloacal en la zona noroeste de nuestra ciudad.
Dos obreros murieron ahogados esta tarde cuando se inundó la zanja en la que trabajaban para una extensión de red cloacal en la zona noroeste de nuestra ciudad.
Según las primeras estimaciones, los dos empleados quedaron atrapados entre el barro y el agua que tapó la zanja luego de que una de las paredes del lugar en el que realizaban sus labores se desmoronara y rompiera un ducto de agua.
El ducto, ubicado en Herrera y Unión de la zona noroeste de nuestra ciudad, comenzó a perder agua, el lugar se inundó y los dos trabajadares, Julio Lucero, de 54 años, y Ceferino Crespo, de 24, perecieron ahogados.
"El agua se nos vino encima y por el barro la corriente los empezó a chupar", dijo uno de los compañeros de la cuadrilla que trató de rescatarlos.
El pozo tendría unos dos metros de profundidad, "fue una cuestión de segundos, porque era barro y agua, y se nos escaparon de las manos", señaló otro de los operarios que trabajaban en la construcción de desagües cloacales.
Por su parte, uno de los enfermeros de la ambulancia del Sies que trabajaba en el lugar, señaló: "Cuando llegamos había bomberos y policias en el sector tratando de rescatar los cuerpos. Según decían, cuando se produjo el accidente el agua les llegaba a la cintura pero rápidamente el agua los succionó y los tapó", dijo a LT8.
Los trabajadores fallecidos formaban parte de una cuadrilla de una empresa contratista de la Dirección Provincial de la Vivienda, y la obra encarada era la extensión de la red de desagües cloacales.
Trabajan en el lugar personal de Bomberos, de la seccional 30ª de policía y del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) para rescatar los cuerpos.
Por Lucas Aranda
Por Facundo Borrego