Docentes paran por 72 horas y movilizan por aumentos y mejoras edilicias
Los maestros públicos y privados santafesinos iniciaron hoy un paro de 72
horas en rechazo de la oferta de aumento salarial que efectuó el gobierno provincial. En
Rosario, Amsafé llevará hasta el Complejo Pedro de Vega sus reclamos
que incluyen los problemas de infraestructura que padecen algunas escuelas de la
ciudad.
9 de marzo 2010 · 08:50hs
Los maestros santafesinos, tanto públicos como privados nucleado en Amsafé y Sadop, inician hoy
un paro de 72 horas y en Rosario llevarán hasta el Complejo Pedro de Vega sus reclamos por los
problemas de infraestructura que padecen algunas escuelas de la ciudad. En esa situación están la
Nº 1.337, que realizó ayer un abrazo solidario (ver aparte) y el Jardín de Infantes Nº 232, que fue
clausurado a fines de febrero y aún no pudo iniciar las clases.
“El ciclo lectivo empezó con problemas en muchos establecimientos
y esto va más allá del reclamo salarial y las medidas de fuerza”, dijo el titular de Amsafé
Rosario, Gustavo Terés, y agregó: “Esta medida tiene que ser un nuevo llamado de atención
para que el gobierno y todos los sectores políticos puedan discutir políticas económicas y
tributarias que beneficien a los trabajadores”.
Esperanza. Mientras tanto, el ministro de Gobierno, Antonio Bonfatti, afirmó ayer
en declaraciones radiales que apenas la provincia consiga el dinero convocará a los gremios para
seguir negociando. La esperanza está cifrada en los proyectos sobre reforma tributaria que discute
la Legislatura (ver Economía).
Sin embargo, el dirigente de Amsafé volvió a calificar la oferta
salarial planteada por la administración Binner como “el 7% de la vergüenza” y calificó
de “regresiva y autoritaria” la política de debate del gobierno. Terés insistió en que
la gestión socialista tiene que “dar respuestas” y aclaró que este conflicto “no
se trata sólo de una disputa económica por un punto más o menos de aumento, sino que es una lucha
para poder vivir con dignidad, poder ejercer nuestro trabajo y poder formarnos. Esto es lo que se
debe debatir”.
Infraestructura. En ese marco y con el inicio del paro, docentes de diferentes
escuelas de la ciudad se concentrarán hoy, a partir de las 11, en la sede rosarina del Ministerio
de Educación (Alem y Gaboto). Hasta allí, directivos y docentes de diferentes escuelas llevarán sus
reclamos de mejoras edilicias.
“La movilización es para expresar el malestar que generan los
problemas edilicios, más allá del reclamo salarial”, indicó Terés y afirmó que “el
ciclo lectivo comenzó una vez más con muchos problemas de estas características”.
Una muestra de la situación que describió el dirigente gremial es la del
Jardín de Infantes Nº 232, que funciona en Comercio 1624, en la zona norte, y donde concurren casi
200 alumnos de 3, 4 y 5 años que están divididos en ocho secciones en los turnos mañana y tarde.
Allí las clases todavía no empezaron.
“A fines de febrero nos dijeron que el edificio estaba clausurado
por problemas edilicios y que debíamos trasladarnos a dos salones de la Escuela Primaria Nº 825,
pero todavía no nos dieron plazos para las obras necesarias en el edificio y tampoco enviaron los
fletes necesarios para mudar todos los materiales del jardín”, explicó la directora, Viviana
Almada.
El traslado sería provisorio, pero nadie determinó los plazos. “La
obra comenzó por un problema en la instalación de agua, pero descubrieron que hay grandes pozos
debajo de la loza y que es imposible hacer los trabajos con los chicos adentro”, explicó
Almada.
La directora también insistió en que “la mudanza tampoco es tan
fácil, porque significa reinsertar a los chicos en otro ámbito, que además tienen que compartir con
alumnos que son más grandes” y agregó que “si el ministerio (de Educación) determina el
traslado, tiene que dar respuestas y garantías para hacer la mudanza y que los chicos no queden dos
meses sin clases”.
Más problemas. Sin embargo, los problemas van más allá de lo edilicio. “Hace
12 años que pedimos portero y tampoco hay auxiliares docentes para las salas de 3 y 4 años, donde
los chicos necesitan ser incluso acompañados hasta el baño”, dijo la directora del jardín de
infantes.