La discusión en el Concejo por el aumento del boleto subió ayer unos decibeles, reforzó argumentos a favor y en contra y se postergó para el jueves próximo, a las 8.30. El consenso no llega y el oficialismo dice que el tiempo se acaba. Para la oposición, la presión es el peor camino para lograrlo. El cuello de botella está en el cálculo y en preguntas sin respuestas. Y, en ese marco, el Peronismo Solidario, que integra Carlos Cossia junto a otras organizaciones, difundirá hoy alternativas para amortiguar la suba. Aunque el edil también es centro de atención por sus futuros pasos políticos.
Todo indica que está a punto de sumarse al bloque que actualmente integran los concejales Miguel Zamarini, Martín Rosúa y Aldo Pedro Poy. "Recién estamos de novios", dijo Cossia, eligiendo el humor como tangente. Y confirmó que el diálogo existe y que faltaría una reunión (a realizar a la brevedad) para salir a dar el anuncio con todas las letras. Además, refirió una acción casi de perogrullo: tuvo más de un convite para integrarse a otros bloques en función de su "independencia".
"Tendremos una conversación. Será en forma inmediata, pero ahora sería apresurado", indicó Cossia, y volvió a eludir la respuesta respecto del polígono de fuerzas que lograría el oficialismo con su incorporación. "Sólo Dios sabrá", aseguró —enigmático— el edil, cuyo bloque tiene una sola banca y que hoy, a las 9.30, difundirá varias medias que, según considera, hay que tomar para que el aumento del boleto no duela tanto en el bolsillo de los ciudadanos.
"Esa es mi mayor preocupación", agregó el hombre que acaba de ingresar al Palacio Vasallo y que propone crear una fuente de financiamiento para bajar el aumento del boleto con una tasa que grava la ganancia que se obtiene en el casino o comercios y juegos similares.
Se trata de un gravamen del 5 por ciento en el cambio de fichas por dinero. Lo recaudado irá al Fondo Compensador del Transporte Urbano, a la compra de insumos médicos en hospitales, a la construcción y mantenimiento de centros de salud, dispensarios y centros de rehabilitación de las distintas adicciones, incluidas, los ludópatas. Además, Cossia propone rever franquicias vigentes, como la gratuidad para mayores de 69 años y los estudiantes.
"En el primer caso, sería para los que no tienen jubilación o poseen la mínima. En el segundo, sería de acuerdo a la situación económica. Por ejemplo: si fuera mi hijo, no debería tomar ese beneficio", indicó.
También propuso que el Banco Municipal se desprenda del 3 por ciento de lo que cobra por la administración de la tarjeta del transporte público. "Cuando sumamos todo esto, se hace una cifra interesante", comentó Cossia, a punto de dar un salto interbancas que sería sólo la primera de varias movidas en el Vasallo.
Cuarto intermedio. En tanto, la reunión que ayer realizó la comisión de Servicios Públicos no logró acordar el aumento del boleto. Según advirtió el radical Jorge Boasso, el Ejecutivo debe respetar al cuerpo enviando la información que se le pide, como por ejemplo, por qué se incluyó el IVA en el costo del pasaje, que a su entender necesita un recálculo desde el arranque: hacerlo en función de los kilómetros recorridos en lugar de esa misma unidad por pasajeros.
El peronista Osvaldo Miatello dejó sentado que, hasta el momento, entre la oposición y el oficialismo hay una raya trazada que se vuelve infranqueable por la actitud inflexible del Palacio de los Leones a modificar la forma en que se calcula el costo del boleto. E insistió en que mientras no se incluya en la misma el subsidio de 80 millones de pesos que cada mes la Municipalidad les da a las empresas que integra, La Mixta y Semtur, toda cuenta estará distorsionada.
Entonces, para Miatello la cifra rondaría los 4,30 pesos. Setenta centavos por debajo de los 5 pesos que, en la actualidad, se estima que debe costar poner un pie arriba de los colectivos. El no considerar ese subsidio millonario al definir el aumento implicará, según el concejal, el cuello de botella más serio de la discusión.
Pero fue la edila del PRO María Julia Bonifacio quien apuró un interrogante. "La Municipalidad dice que no incorpora los 80 millones porque no quiere incluir a Rosario Bus en ese beneficio, pero el subsidio que llega desde la Nación se aplica a las tres empresas que integran el sistema. ¿Por qué esa diferencia?", planteó, para luego pedir "blanquear la situación porque, de lo contrario, parece que esa movida es para dar un aumento a la concesionaria privada" (ver aparte).
Respecto del costo del pasaje del subterráneo de la Capital Federal, tomado varias veces como caso testigo por el oficialismo en las discusiones locales, la concejala sentenció: "Desde 2013 la Nación retiró el subsidio a ese servicio. Quisiera ver qué haría la intendenta Mónica Fein si la Casa Rosada no enviara estos fondos".
Rosario Bus quiere retener sólo el 30% del sistema
La empresa Rosario Bus le propuso al municipio una rescisión anticipada y parcial del contrato motivada en las diferencias financieras entre costos y tarifas. La medida dejaría a la única concesionaria privada sólo con el 30 del 56 por ciento que hoy ocupa dentro de transporte público de pasajeros. En el Palacio de los Leones ratificaron que no hay intención de sumar líneas de colectivos a la gestión del Estado, que actualmente gerencia el 45% de ese espacio a través de la Semtur y La Mixta.
“Creemos en la convivencia pública y privada, pero también entendemos que los privados requieren de la financiación que les permita brindar servicios de calidad”, explicó ayer a La Capital la titular del Ente de la Movilidad (EMR), Clara García, quien dijo que Rosario Bus realizó el pedido por las diferencias financieras entre costos y tarifas.
Si bien la nota de Bermúdez llegó al Palacio de los Leones en la segunda quincena de febrero, ayer salió a la luz en el marco de la búsqueda de consenso para fijar una suba del boleto. Incluso, el tema ya estuvo en la agenda del ente. “Mientras esté vigente el contrato, tiene que cumplirlo”, dijo García.
Luego recordó que las señales de crisis de Rosario Bus llegaron el año pasado, cuando la firma inició un procedimiento ante el Ministerio de Trabajo provincial para quedar habilitada a tomar medidas ad hoc.