Los rescatistas que trabajan en la zona de la tragedia lograron cortar la loza del tanque de agua que obstruye el avance de los socorristas hacia el tercer subsuelo, que es donde uno de los socorristas detectó esta mañana que hay un depósito o una baulera, lo que alimentan las expectativas de encontrar personas con vida.
Hace unos minutos, los socorristas cortaron la gigantesca loca en dos partes, cortaron las uniones de metal y la grúa se estaba preparando para ir sacándola a pedazos.
Una vez que la maquinaria pesada termine de sacar las partes grandes, lo que se debe hacer con un cuidado absoluto para evitar algún tipo de desmoronamiento o taponamiento de los espcios libres. Posteriormente, los rescatistas retomarán el trabajo manual.
Por su parte, el secretario de Protección Civil de la provincia de Santa Fe, Marcos Escajadillo, dijo esta mañana que "el esfuerzo pasa ahora por desagotar los subsuelos para liberar la presión bajo tierra y permitir el trabajo seguro de los rescatistas".
Tras insistir en que continúa abierta la posibilidad de encontrar sobrevivientes, el funcionario precisó que "ya se removió el 70 por ciento de los escombros", en el edificio siniestrado, "pero aún falta la parte más compleja", finalizó.
Al tiempo, que el ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, dijo hoy que los rescatistas lograron acceder al tercer subsuelo del edificio donde ocurrió la explosión que causó la muerte a 13 personas y decenas de heridos, y que en el lugar observaron "espacios como bauleras o depósitos, lo que genera cierta expectativa por la posibilidad de hallar sobrevivientes.
"Hace dos horas un socorrista logró acceder al tercer nivel, es decir el último subsuelo (del edificio siniestrado, en Salta 2141) y vio que hay allí espacios de lo que podría ser un depósito o baulera", contó el ministro Lamberto este mediodía a La Ocho.
No obstante, dijo que el resto de los rescatistas aún no han podido trabajar en ese sitio porque hay riesgos, está muy endeble la zona. "Se está rompiendo el tanque para tratar de sacarlo en trozos porque es muy pesado, con agua tenía casi 40 toneladas, o sea que es un tanque de magnitud, de otros tiempos, con otra estructura. Hay muchísimos rescatistas acelerando la posibilidad de romperlo en pedazos para poder sacarlo con sistemas mecánicos", sostuvo este mediodía el ministro antes de que cortaron la loza.
Al respecto manifestó que "espacios hay, según los socorristas, las esperanzas en materia de emergencias nunca hay que abandonarlas, siempre hay que mantenerlas vivas; los socorristas son los que nos transmiten a nosotros que las esperanzas hay que mantenerlas vivas", reiteró Lamberto.