Noviembre es el único mes del año en el que en Rosario se puede recorrer el mundo con apenas una caminata. Desde hace una semana, el Parque Nacional a la Bandera es escenario del 32º Encuentro y Fiesta Nacional de Colectividades, la celebración más masiva de la ciudad por la que todos los días pasan miles de visitantes. "Venimos sobre todo por la comida", dice Daiana, una mamá de 37 años que todos los años se acerca con sus hijas a comer paella. "Siempre probamos una distinta", comenta sentada en una mesa de Catalunya. Los platos para compartir son los más elegidos por los visitantes. "Así se puede probar un poco de todo y además es más barato", remarca Eduardo, que hace cinco años tomó la costumbre de acercarse a la fiesta con su hijo Nicolás, de 8.
El centro de la celebración son, sin duda, los platos típicos de las distintas colectividades. Son más de 20 los países que tienen puestos en los que además hay espacio para deleitarse con la música y bailes regionales.
Una de las preocupaciones comunes de todas las agrupaciones era el nivel que tendrían las ventas respecto de años anteriores. Es que con la inflación que se registró en los últimos meses, el primer recorte que aparece es el de las salidas a comer afuera. Sin embargo, el balance de los primeros días fue positivo. "Estamos vendiendo lo mismo que el año pasado", aseguró Alejandro Toguchi, presidente de la colectividad japonesa. "Nosotros tenemos una clientela cautiva", bromeó y aseguró que los clientes que pasan por el stand de Japón esperan el año entero para saborear el sushi o el tempura que se elaboran allí.
Respecto de 2015, desde esa colectividad sostuvieron que el reajuste de precios fue de entre el 15 y el 20 por ciento. Fue aproximadamente el mismo incremento que se registró en los stands de distintas regiones de Italia y España.
Recalculando. Por estas fechas, el mal clima suele achacársele a las Colectividades. No hay nadie que no lo sepa: la fiesta viene pasada por agua y, por ese motivo, suele cancelarse algunas noches. Este año no ocurrió. Desde el viernes 4 el tiempo acompañó las jornadas interculturales. Sin embargo, las actividades programadas para el miércoles y jueves últimos fueron postergadas debido a un paro de 48 horas que afectó a trabajadores municipales que reclaman la reapertura de paritarias. Desde el municipio informaron que, debido a la cancelación de dos jornadas, el Encuentro se extenderá hasta el martes 15 de noviembre, en vez de terminar hoy, tal y como estaba previsto.
"Cerramos estos dos días, pero se extendió dos días más, así que no nos perjudica", explicó Guillermo Gómez, de la colectividad palestina. "Nuestro plato fuerte es el Shawarma, que es la comida rápida árabe. Pero trabajamos con ingredientes frescos, así que no perdimos mercadería por el cierre", aseguró, en concordancia con los representantes de otros países.
Seguridad. Este año, la celebración cuenta con un estricto operativo policial. Cada uno de los puestos está custodiado por dos efectivos identificados con chalecos amarillos. Además, para ingresar al predio de Colectividades hay que atravesar un cordón de efectivos policiales y de la GUM. Si lo consideran necesario, los uniformados revisan los bolsos y mochilas de los que pretendan entrar. Pero no ocurre con todos: con observar el operativo por unos minutos, queda de manifiesto que las requisas son selectivas aunque, ante la consulta, no especificaron los criterios utilizados para realizarlas.
Identidades en Argentina
Una Ultima Cena bien argenta enmarca las mesas del stand de Colectividades donde se pueden degustar sabores "bien de acá". La imagen es bíblica: en el centro de un tablón sostenido por caballetes, en cuero y enterrando una cuchilla en la carne, el asador. Es el único que mira a la cámara y está rodeado por un singular grupo de apóstoles, algunos ataviados con camisetas de fútbol, que completan el ritual. La mesa es la del asado del domingo: hay ensalada, sifones, vino en caja, chorizos, morcillas. La fotografía forma parte de la intervención Nuevas Identidades, del artista Marcos López, que hasta el próximo martes se podrá recorrer en el 32º Encuentro y Fiesta Nacional de Colectividades. La obra de López, que abarca todo el stand argentino, apunta a crear una experiencia visual en torno a las costumbres y las identidades nacionales. En las fotografías que integran la muestra confluyen sabores, aromas, colores, texturas y fisonomías. Todo gira en torno de un concepto, el de las identidades que generan las migraciones, los cruces, un concepto que pide ser redefinido, reinventado, repensado.
Pero la propuesta argentina en colectividades apunta también a la participación del público. Un living ecléctico es la escenografía montada en un set fotográfico por el que todos los días pasan cientos de visitantes para crear su propia historia en una imagen. Todos los objetos están a disposición de quien atraviese el espacio para interactuar con ellos como se le ocurra. Las imágenes son colgadas diariamente en el Facebook del estudio de Marcos López.