Durante el primer semestre de este año, casi 4 mil motociclistas infractores pasaron por los cursos de concientización a los que obliga a concurrir la Municipalidad para retirar sus motos del corralón. La cantidad de asistentes duplicó el número de participantes del año pasado.
Al frente de la Secretaría de Control, Pablo Seghezzo, destacó la convocatoria y evaluó la propuesta: "Nuestra tarea es garantizar un tránsito seguro, apostamos a la sanción de quienes infringen la normativa, pero sobre todo buscamos que esas personas comprendan, a través de un proceso de sensibilización, la importancia de incorporar como hábito una conducción responsable".
Este panorama no llegó solo; está acompañado de mayores fiscalizaciones en el espacio público, que han crecido desde el inicio de 2014.
En el área de Control afirmaron que hubo además un "severo refuerzo de las tareas desarrolladas en la calle (verificación de documentación, elementos de seguridad y realización de tests de alcoholemia, entre otras)".
Los registros de la Dirección General de Tránsito del municipio revelan la situación.
Durante los primeros seis meses de este año, se dictaron 129 talleres, de los que participaron 3.933 personas. En tanto, en 2013 se llevaron adelante 87 talleres con un total de 1.937 asistentes.
"Consideramos que la educación es una herramienta vital para generar una conducción segura que respete la vida del propio conductor, la de acompañantes y peatones. Al tránsito lo hacemos entre todos y no basta que el Estado sancione; también es deber nuestro instar a que la ciudadanía aprenda, comprenda y haga propias las reglas que nos organizan", observó Seghezzo.
Esta instancia está destinada a aquellos conductores que cometen faltas graves en función a lo establecido por las normas de tránsito.
Según la ordenanza 8.014, para retirar la moto del corralón es una condición ir a los talleres.
En este sentido, los rodados cuyos choferes no acrediten la documentación exigible o la chapa patente, estén a bordo de un vehículo considerado peligroso (sin elementos de seguridad o antirreglamentarios), tengan alcoholemia positiva u obstruyan el tránsito, serán remitidos a los predios de la Intendencia.
Además, el director de Tránsito de la Municipalidad, Gustavo Adda, advirtió que, en caso de que el conductor sea menor de 18 años, los jueces municipales de Faltas tienen la facultad de sancionar tanto al joven como a sus padres. Es así que al taller deberá ir el joven acompañado por alguno de ellos.
Según pudo saber La Capital, muchos motociclistas se niegan a participar de los cursos porque, si bien sus vehículos fueron remitidos al corralón, en ciertas oportunidades el juez no impone una multa en dinero.
Aun así, tienen que asistir a los talleres de concientización.
Por otro lado, el Departamento de Educación Vial también brinda charlas, talleres, y capacitaciones a distintas instituciones, empresas y organizaciones de la ciudad.
Este año, el personal del área asistió a 13 colegios de la ciudad y también a uno de Villa Gobernador Gálvez.
En total, 1.385 alumnos de distintos niveles educativos, recibieron formación en materia vial.
En tanto, se organizaron instancias educativas para empleados de diferentes empresas rosarinas, algunas de ellas adheridas al Programa 100 por ciento Casco y otras que deciden capacitar al personal en la materia.
Así, en total, 938 trabajadores de firmas diversas asistieron también a las capacitaciones.
Todas instancias que buscan frenar la creciente cantidad de accidentes de tránsito.