Afirman que bajaron 50 por ciento los delitos violentos por los operativos federales

Según datos del Ministerio de Seguridad, a poco más de dos semanas del desembarco de las fuerzas federales en Rosario, los delitos con arma de fuego se redujeron más de un 50 por ciento en la ciudad. También se registró un descenso similar en las denuncias por robos concretados a través de motos. Y en el municipio detectaron una "ostensible" baja en los heridos por impacto de bala que ingresaron para ser atendidos a las guardias de los hospitales locales durante los últimos 15 días.

"El balance de los operativos en conjunto, entre la policía provincial, Gendarmería y Prefectura en los primeros barrios donde estaba proyectado el desembarco es altamente positivo", resaltó el titular de la Unidad Regional (UR) II, José Luis Amaya.

El jefe de la policía rosarina destacó que las denuncias de "determinados delitos han disminuido un promedio del 50 ó 60 por ciento" en las zonas donde se implementaron esos procedimientos.

De todos modos, Amaya se mostró cauto al hablar de números porque "habría que hablar de delitos específicos", y con mayor cantidad de días para hacer un análisis más pormenorizado.

Los números que brindó el jefe de la UR II fueron analizados ayer en un cónclave del que participó la plana mayor de la policía provincial y la conducción del Ministerio de Seguridad, en contacto con las áreas de manejo operativo de Gendarmería y Prefectura.

La estadística que manejan en el gobierno provincial se nutren de las denuncias efectuadas por los particulares "que son la principal fuente de información con la que cuentan los investigadores".

El secretario de Seguridad santafesino, Matías Drivet, confirmó a La Capital que los indicadores que manejan a 15 días de la llegada de las fuerzas federales a la ciudad son "altamente favorables".

Según confió el funcionario, los delitos que menos se registraron en las últimas dos semanas fueron los robos con arma de fuego y los cometidos utilizando motos.

No obstante, Drivet se excusó de hacer un balance en profundidad de la temática. "Los datos que manejamos son provisorios, hay que esperar un tiempo prudencial antes de sacar conclusiones apresuradas que pueden generar expectativas desmedidas en la sociedad", afirmó.

Drivet reconoció que hasta el momento no se detectó un cambio profundo en cuanto a la compra venta de drogas en la ciudad. "El consumo no baja de una semana a otra, están cambiando modalidades de comercialización y han surgido nuevas disputas (desde que las fuerzas federales ocuparon los territorios violentos)", agregó.

Hospitales. Por su parte, el secretario de Salud Pública de la Municipalidad, Leonardo Caruana, admitió que en las últimas dos semanas "se notó una ostensible disminución en los ingresos de pacientes heridos de gravedad y en situaciones de emergencia a las guardias" de los hospitales Roque Sáenz Peña y de Emergencias Clemente Alvarez (Heca).

El descenso en la cantidad de heridos graves que llegaron a los efectores locales de mayor complejidad generó cierta descongestión de las áreas de cuidados intensivos y las propias guardias.

El titular de la cartera sanitaria local coincidió con Drivet y el comisario Amaya respecto a la necesidad de hacer un balance no tan inmediato sobre el impacto de la presencia de las fuerzas federales en Rosario.

"Hasta ahora tenemos indicios de un cambio de situación. Pero para poder hacer un balance más profundo habría que esperar que se cumpla al menos un mes de estos operativos federales para cuantificar el impacto que ha tenido en el sistema de salud pública", agregó Caruana.

Gendarmes ya cuidan el centro

Desde el jueves, agentes de Gendarmería y Prefectura recorren el centro de Rosario y la zona bancaria junto a la policía provincial. "Ampliando el radio de acción, lo que hace ahora Gendarmería junto con la policía es incursionar en el microcentro en prevención del delito que tengan que ver con entidades bancarias o financieras y los comercios en ese campo de acción", precisó el jefe de la policía de Rosario, José Luis Amaya.