Por Lucas Ameriso
De varias lecturas que provocan estos datos, el tipo de cambio con el dólar, la devaluación y la pérdida de poder adquisitivo modificaron los porcentajes del tráfico aéreo internacional y sus proyecciones. En un nuevo escenario, todo indica que la reconversión hará énfasis en ampliar la conectividad dentro del país.
La autoproclamada por el gobierno nacional "revolución de los aviones" benefició al aeropuerto rosarino, que además viene recibiendo una millonaria inversión del gobierno provincial en infraestructura.
Sin embargo, la volatilidad del dólar y la devaluación del peso, la pérdida del poder adquisitivo está produciendo un punto de inflexión en el tráfico aéreo del presente y su proyección a los próximos meses.
Hace dos años atrás, Copa concretaba su ruta inaugural a Panamá con un avión "tuneado" con los escudos de Newell´s y Central. Y Latam concretará su vuelo inicial a Lima (Perú). En la misma época Sky, la compañía chilena empezó a unir Rosario con Santiago de Chile.
La brasilera Azul asomó con vuelos a buenas tarifas al sur del hermano país y hasta el nordeste. Aerolíneas Argentinas no quiso quedarse atrás. En septiembre sumaba más destinos: Florianópolis, Punta del Este y Río de Janeiro.
Con el viento de cola, el dólar "competitivo" para las salidas internacionales, hace exactamente un año atrás seis aerolíneas propusieron ayer 26 nuevos vuelos internacionales para Rosario y otros 13 de cabotaje.
Todo este combo, sumado a los vuelos de cabotaje pusieron a la ciudad en el mapa internacional y nacional. Las políticas nacionales empujaron la actividad aérea.
A mayor conectividad, llegaron más pasajeros a una estación que mejoró su plataforma y tiene licitada la construcción de un segundo edificio a doble altura lindero al actual aeropuerto.
Pero en mayo pasado, las corridas cambiarias cambiaron el escenario. En este escenario cambiante, entre un dólar de 22 pesos a casi 40 pesos, las compañías empezaron a hacer algunos ajustes a su planes de vuelos para Rosario.
Según el Eana, que depende de Nación, por primera vez en muchos años, comparando agosto 2017 con agosto de este año registró una leve caída: 6 por ciento entre pasajeros arribados y despegados.
Mientras que en cabotaje arroja una diferencia positiva del 7 por ciento, la diferencia interanual en internacionales da un rojo de un 17 por ciento menos. El Eana indica en su informe (www.eana.com.ar) que los datos de los últimos tres meses son "provisorios".
Otras cifras
En contraposición, voceros del la estación aérea local aportaron otra información en la comparación interanual. En agosto de 2017 entre embarcados, arribados y en tránsito hubo 64.959 pasajeros en el aeropuerto de Fisherton.
En agosto la cifra trepó a 72.684, arrojando un 11.89 por ciento de crecimiento. En relación a los vuelos internacionales para agosto del año pasado fueron 36.733 pasajeros contra 36.860 de este año.
Pero amén de las estadísticas de uno y otro ente, la realidad refleja una retracción en los vuelos internacionales. La compañía aérea chilena Sky Airline fue la primera low cost que desembarcó en Rosario y es ahora la primera en irse. Hace un mes anunció que dejará de operar por la terminal local desde el próximo 30 de septiembre.
Según el comunicado de la empresa, el motivo fue la baja demanda de tickets.
La línea chilena había arrancado con tres vuelos semanales, que redujo a dos, y ahora se retiró del mercado local.
Y el resto de las compañías ya evalúa achicar sus aeronaves y reducir las frecuencias. Un plan de contingencia que intenta adaptarse a los nuevos aires.
En las últimas horas, trascendió que Aerolíneas Argentinas suspendería la conexión directa a Río de Janeiro prevista para el 5 de octubre.
En su reemplazo lanzaría el vuelo para la temporada de verano a partir del 1º de diciembre. Si bien no hubo confirmación, LaCapital intentó comprar vuelos directos a partir de octubre y no existían.