El anuncio del gobernador Miguel Lifschitz de invertir 450 millones de pesos para realizar obras en el aeropuerto rosarino acrecentó aún más la grieta que empieza a abrirse en el Frente Progresista. El intendente de Santa Fe, José Corral, estuvo lejos de aplaudir el plan de infraestructura y lanzó: "Reclamamos que la provincia se haga cargo no de un sólo aeropuerto, sino del sistema de aeropuertos que tiene Santa Fe y que integra Sauce Viejo".
Las declaraciones del mandatario santafesino llegaron horas después de que Lifschitz presidiera una rueda de prensa en la terminal área rosarina en la que destacó una serie de obras de infraestructura para la terminal aérea que incluye la construcción de una moderna estación para el embarque de vuelos internacionales. "Queremos en un par de años inaugurar esta obra que nos vinculará más con el mundo y pondrá a Rosario en el futuro y la modernidad", subrayó Lifschitz.
El plan integral de infraestructura para el aeropuerto incluye proyectos por 450 millones de pesos que jerarquizará su conectividad vial, ferroviaria, y tiene como licitación más trascendente la ejecución, con un plazo de obra de dos años, de un nuevo edificio para vuelos internacionales, lindero al existente.
La noticia no le cayó muy bien al intendente radical de la capital provincial. Es que el aeropuerto de Sauce Viejo tiene su pista de aterrizaje en mal estado y los aviones que operan desde allí lo hacen a un solo destino: Buenos Aires.
En efecto, la operatividad de ese aeropuerto se reduce a sólo dos vuelos diarios a la Capital Federal, y además esa terminal aérea presenta un deficiente sistema de iluminación.
"Esperamos que en los próximos días haya un anuncio similar para el aeropuerto de Sauce Viejo. Reclamamos que la provincia se haga cargo no de un sólo aeropuerto, sino del sistema de aeropuertos que tiene Santa Fe y que integra Sauce Viejo", señaló Corral tras participar del acto de la apertura de sobres para construir el edificio de la primera Escuela de Trabajo en Barranquitas Sur.
El intendenta de Santa Fe también se mostró molesto con el gobierno nacional.
Lo que viene. Más allá de la polémica, lo que viene en materia de infraestructura para el Aeropuerto Islas Malvinas es ambicioso. Según detalló el secretario de Transporte santafesino, Pablo Jukic, la intervención integral se agrupa en 4 paquetes licitatorios: la doble traza de Jorge Newbery, el acceso al aeropuerto desde las autopistas de Córdoba y Santa Fe (por ruta 34) a cargo del municipio rosarino; un fideicomiso entre la terminal aérea y los privados para realizar hangares de los vuelos privados; la adecuación de la calle de rodajes y ampliación de la plataforma (pliegos ya confeccionados y a la espera de Nación) y el nuevo edificio internacional, con tres pisos, 9 mil metros cuadrados cubiertos y dos mangas para abastecer en simultáneo a dos vuelos internacionales.
"Lo más urgente es la construcción de la nueva terminal, estamos terminando los pliegos licitatorios para en unos meses estar licitando y hacerla en dos años. Vamos a ponerle todo el esfuerzo para cumplir", subrayó ayer Lifschitz.
El apuro tiene una explicación. El mes próximo la estación aérea local recibirá 4 vuelos diarios de estas características con conexión a Lima (Perú), Panamá, San Pablo y Río de Janeiro (Brasil).
"Por eso se apunta a poder recibir dos vuelos de 220 pasajeros cada uno", remarcó Jukic, y estimó la inversión en el nuevo edificio en unos 250 millones de pesos.
Otro dato habla del volumen de circulación del Islas Malvinas: para 2017 se espera que 500 mil personas transiten por sus instalaciones.
"Esperamos contar con el apoyo del gobierno nacional para los recursos, más allá de la decisión de impulsarlo rápidamente. Además de los vuelos internacionales, también estamos en gestiones con Aerolíneas Argentinas para ampliar los vuelos de cabotaje", apuntó el gobernador.
Lifschitz habló de un proyecto viable para poner a Rosario "en la modernidad y el siglo XXI", y cerró con una frase: "No hay que dejar pasar el tren y subirse a tiempo. Pero hay que subirse al tren del desarrollo sustentable y la igualdad social".
Accesos. Por su parte, la intendenta Mónica Fein resaltó que entre las obras que jerarquizarán el aeropuerto se incluyó una segunda ronda de Circunvalación desde el puente Rosario Victoria, pasando por ruta 34, la autopista a Santa Fe y Córdoba e ingresando por Uriburu hasta el puerto local.
"En los próximos meses vamos a avanzar en la conectividad con la autopista a Córdoba y estamos elaborando el proyecto para unirlo con la ruta 34. La obra de Newbery está en el listado de obras que están pendientes del okey de la Legislatura para un endeudamiento. Con fondos municipales vamos a terminar avenida Mendoza para colaborar con la conectividad del aeropuerto", destacó Fein.
La intendenta puso énfasis en la traza ferroviaria Rosario-Cañada de Gómez, para planificar la conectividad con la estación Rosario Norte y así hacer llegar pasajeros que trasborden del tren a pocos pasos de tomarse un avión.