El avance de los nuevos proyectos de urbanización en los terrenos ubicados en Puerto Norte produjeron el primer cruce del año entre el Concejo Municipal y la Intendencia. En tierras de la ex Unidad 1 (Faca), Forum pretende avanzar con su plan maestro para montar torres de alta gama, pero según denunció a través de un pedido de informes el Partido del Progreso Social (PPS), el urbanizador quiere montar un edificio de 66 metros justo arriba de un gran acueducto que sirve de agua potable a todo el centro y el sur rosarino y Villa Gobernador Gálvez. Aunque el Ejecutivo lo niega (ver aparte).
Los ediles opositores Héctor Cavallero y María Fernanda Gigliani presentaron un proyecto al cuerpo deliberativo en el que le exigen a la intendenta Mónica Fein que gestione ante Aguas Santafesinas SA (Assa) un informe y opinión fundamentada acerca del proyecto de urbanización que la desarrolladora TGLT (que está culminando Forum en Theddy y Carballo) pretende llevar adelante en el terreno lindero a la planta potabilizadora.
La inquietud surgió tras una reforma al proyecto original (masterplan) que hizo el estudio Forster, a pedido de TGLT, para la ex Unidad 1.
La luz de alerta se encendió en la última sesión del Concejo del año pasado, donde ingresó para su tratamiento sobre tablas la modificación introducida por parte del urbanizador a su proyecto original, y que el Ejecutivo envió para su aprobación.
Si se retira esa estructura subterránea para liberar la tierra, gran parte del centro y el sur rosarino se quedaría sin presión de agua hasta que reubiquen los caños, con una inversión muy costosa.
Y, si bien se plantea la existencia de una servidumbre a favor de Assa sobre los conductos que pasan por el predio, el mensaje del Ejecutivo permitiría que la empresa urbanizadora solicite el permiso de edificación en la manzana Nº 2, lo que haría desistir a la compañía estatal de su derecho a preservar inalterable el trazado de esos caños.
A raíz de esos cambios en el proyecto, Assa le notificó el 20 de julio pasado a la Secretaría de Planeamiento municipal que tiene una servidumbre de paso a su favor. Cuatro días antes, ya se lo había advertido al urbanizador y le recordó que las servidumbres constan en las escrituras del predio en cuestión.
Pero, además, la compañía estatal manifestó la imposibilidad de modificación de las cañerías debido a la antigüedad, diámetros y presión de trabajo de las mismas. Y advirtió que cualquier construcción no deberá afectar los conductos, atendiendo al alto riesgo que eso traería aparejado para la prestación del servicio.
También por nota, Assa notificó a Forum sobre las instalaciones de transporte de agua potable que abastecen al centro y al sur de Rosario, que consisten en un gran acueducto (denominado río subterráneo) ejecutado en la década de 1960 y dos cañerías maestras de fines del siglo XIX y principios del XX.
A su vez, en agosto, el desarrollador le comunicó a Planeamiento que no haría modificaciones al masterplan.
"No reconoce derechos reales de ningún tipo a favor de Aguas sobre el inmueble en cuestión y hace expresa reserva de ello", se dejó asentado en el texto de los ediles cavalleristas. Luego advirtió que, "pese a todos esos informes y señalamientos técnicos y legales acerca de la inconveniencia de que sobre las servidumbres establecidas se lleven adelante en cualquier tipo de construcción, el Ejecutivo remite al Concejo un proyecto que presenta edificaciones de hasta 66 metros de altura sobre los espacios de servidumbre, como los planteados en la manzana Nº 2 del masterplan".
Como consecuencia de lo expuesto, Cavallero y Gigliani consideraron que "el municipio pareciera que ha laudado a favor del urbanizador, desatendiendo las advertencias de Assa y los derechos que la asisten y poniendo en riesgo la prestación del servicio sanitario en la ciudad o llevando a la empresa pública a tener que realizar una inversión millonaria que no estaría dentro de sus obligaciones ni prioridades".
Frente a la reapertura de las sesiones ordinarias (7 de marzo), los concejales opositores insistirán en solicitarle a Assa un nuevo informe para contar con información actualizada y conocer si hubo alguna modificación a lo planteado oportunamente.
Miedo a un potencial juicio
“Sacar estos caños dejaría sin agua a gran parte del centro y el sur rosarino. Llama la atención el apuro por aprobar este proyecto, más aún con el informe negativo de Assa”, consideró el concejal Héctor Cavallero. “La polémica es con la servidumbre para los dos caños que están en la manzana Nº 2 y que la constructora, con tanta liviandad, desconozca los derechos de Aguas y haga reserva de derechos para un eventual juicio”, alertó su par Fernanda Gigliani.