Córdoba.- Una mujer de 29 años, madre de una niña de corta edad, murió tras
una operación de implante de siliconas realizada en una clínica de la ciudad de Córdoba,
denunció hoy su esposo.
Fernando Garbino aseguró que su mujer fue intervenida el viernes último,
luego la chica
se descompuso y fue llevada nuevamente a la clínica, el domingo ya casi no
respiraba y hoy falleció de un paro cardíaco.
Fernando Garbino aseguró que su mujer fue intervenida el viernes último
por la tarde en la “Clínica del Prado, situada en Deán Funes al 1100”, del barrio
Alberdi, en la capital provincial.
Según sus declaraciones, la mujer habría sido operada por la “médica
Analía Riutort”, que pertenecería a la compañía “Dermo Estética”, situada
en el centro cordobés, quien habría alquilado el quirófano de ese centro médico.
El director de la Clínica del Prado, Adalberto Robles, confirmó que
Riutort opera habitualmente en ese centro asistencial y destacó que allí “tiene todos
los elementos para resolver cualquier problema o complicación”.
La clínica que conduce, aseguró el médico a la prensa, “tiene todas las
acreditaciones” como centro médico de “alta complejidad”.
En ese sentido, el ministro de Salud de la provincia, Oscar González,
reconoció esta mañana que la Clínica del Prado “está habilitada para intervenciones de
más complejidad” aún que un implante mamario, pero advirtió que “no quiero
adelantar opinión porque no tengo la información suficiente para hacerlo”.
Por su parte, Garbino destacó que con su pareja son padres de una nena de
dos años y medio y que su mujer se había sometido por “primera vez” a una
intervención de este tipo.
Tras ser dada de alta el viernes por la tarde, agregó, la mujer se
descompuso y fue llevada por él nuevamente a la clínica.
“Me la llevo a mi casa para que descanse mejor en su cama. Ahí empeoró. El
sábado por la noche la vuelvo a llevar (a la clínica). Me dicen que está bien”, relató
el marido.
Y luego, agregó en declaraciones a radio Mitre Córdoba, “el domingo
por la mañana, no podía respirar casi nada. No hablaba, estaba como totalmente sedada. Le
comento a la doctora y me dice que era por los medicamentos que estaba tomando. Yo la veía
muy mal. A todo esto, siempre tratando de evitar que vayamos a la clínica”.
Según Garbino, luego resolvió trasladar a su esposa otra vez al centro
médico, donde tiempo después falleció.
Al respecto, Robles precisó que la mujer ingresó “prácticamente en paro cardíaco
y no se la pudo reanimar, o sea se la reanimó sin resultado”, sostuvo el director
médico.
“Hicimos la denuncia policial y pedimos la autopsia judicial”,
agregó, ya que de esa forma se actúa en todos los casos de “muerte
dudosa”.
“El resultado de la autopsia va a ser la clave”, destacó
Robles.
Sobre los estudios prequirúrgicos, Garbino indicó: “Le habían salido mal los
glóbulos blancos en la sangre por una infección que tenía en una muela. Le dieron
antibióticos”.
“Jamás volvieron a hacerle otro análisis para ver cómo estaba la
sangre”, manifestó.
El pasado 10 de octubre había muerto otra mujer tras una cirugía estética en esta
provincia.
Por ese caso, el fiscal Gustavo Sandoval imputó de homicidio culposo a los
médicos y anestesistas de una clínica cordobesa que formaron parte del equipo que realizó el
implante mamario de la mujer, quien murió en el Hospital San Roque, adonde había
sido derivada días después de esa operación.
Fuentes judiciales señalaron que la paciente, Mabel Quinteros, de 35 años,
habría sufrido una descompensación durante la intervención quirúrgica, practicada el viernes
3 de octubre.