Una adolescente de 19 años murió electrocutada al tocar un boyero que su novio de 21 años había colocado en un terreno donde plantaba marihuana, en la localidad bonaerense de Escobar.
Una adolescente de 19 años murió electrocutada al tocar un boyero que su novio de 21 años había colocado en un terreno donde plantaba marihuana, en la localidad bonaerense de Escobar.
Eran las primeras horas de un día festivo, pero un accidente doméstico lo convirtió en trágico: en la mañana del lunes 24, una adolescente de 19 años falleció electrocutada en Belén de Escobar al entrar en contacto con un boyero que su novio utilizaba para proteger un cultivo de marihuana. La muerte de Bianca Carolina Garraza conmocionó al barrio La Chechela.
La adolescente llevaba una relación de varios años con Israel Jesús Godoy, de 21 años. Ambos convivían en una casa ubicada sobre la calle Patricias Mendocinas al 1210, donde el muchacho tenía un cultivo de marihuana que protegía con un cable electrificado (boyero) para evitar que algún intruso intente robarlas.
Fuentes policiales indicaron a El Día de Escobar que el trágico hecho ocurrió alrededor de las 9 de la mañana. Presuntamente, la joven estaba regando cerca de las plantas cuando sufrió la fulminante descarga del boyero. Su pareja no estaba con ella porque había ido a trabajar, según explicó una familiar suya en las redes sociales. Otra versión dice que estaba durmiendo y que se enteró por un vecino que vio a la joven tendida en el fondo de la vivienda, ya sin vida.
Al enterarse de lo que había sucedido, algunos familiares y allegados de Garraza se acercaron al domicilio y descargaron su bronca e impotencia contra el novio de la chica, a quien la policía aprehendió por la tenencia ilegal de estas plantas.
Consternada, la madre de la muchacha, Claudia Erazo, reclamó que el joven sea detenido y lo calificó de asesino. "Bianca, mi princesa, voy a dar mi vida por vos. Pido justicia. Su asesino está libre y mi princesa muerta. No voy a parar hasta verte en la cárcel", publicó en su página de Facebook.
En la misma red social, familiares, amigos y conocidos de la chica expresaron su dolor y la despidieron con sentidos y cálidos mensajes. Hay fotos que la recuerdan trabajando en un local de Subway y como playera de una estación de servicio YPF.