Familiares y allegados de los nueve alumnos y la docente del colegio Ecos que fallecieron
en el accidente de tránsito conocido como “la tragedia de Santa Fe”
realizaron hoy una protesta en la sede de los tribunales porteños, para repudiar la
absolución del chofer del ómnibus que participó del siniestro.
En el acto estuvieron los músicos Ricardo Mollo y Luis Alberto Spinetta, quienes
reafirmaron su “solidaridad total” con los padres de los fallecidos y
participaron de una suelta de globos negros.
“Al adelantar el fiscal (subrogante Ricardo Fessia) el resultado (de la decisión
judicial) es un quemo, lo que habla de un arreglo o algo así que genera tanta
indignación”, sostuvo el rockero, y reclamó que “sea apartado inmediatamente y
que se pongan las cosas en orden”.
La hija menor de Spinetta cursó hasta el año pasado en el colegio Ecos, del barrio de
Villa Crespo, “y podría haber sido una de las víctimas”, afirmó en declaraciones
al canal Todo Noticias (TN).
A su turno, Mollo fundamentó su presencia para “acompañar a los padres y esforzarse
en lo que se pueda para que se haga justicia, que los responsables obren a
conciencia”.
“Es que ocurre como una segunda tragedia, encontrarte con el accionar de la
justicia, la manera en que operan, te da como una incertidumbre”, manifestó.
Además, Sergio Kohen, padre de Nicolás, una de las víctimas de la tragedia, pidió
“diferenciar entre la verdad y la mentira” y consideró que el chofer del ómnibus
(Oscar Atamañuk) donde viajaban los estudiantes “actuó por impericia y fue responsable
parcial de la muerte de nuestros hijos”.
El fallo fue apelado en primera instancia y los padres dijeron esperar que “en la
segunda instancia el juez de Cámara entienda” la responsabilidad del chofer en el
caso.
El accidente ocurrió el 8 de octubre de 2006 en la ruta 11, cerca de la localidad
santafesina de Vera, cuando alumnos y docentes del colegio volvían de un viaje solidario en
un pueblo del Chaco.
Un camión Fiat Iveco guiado por un chofer en estado de ebriedad colisionó frontalmente
contra el micro, que no tenía habilitación.
A causa del impacto, murieron nueve estudiantes (cuatro varones y cinco mujeres) de entre
15 y 18 años, una maestra y los dos ocupantes del primer vehículo. (DyN)