Chicago.- Investigadores estadounidenses desarrollaron un microchip altamente
sensible que podría ayudar a los médicos a detectar ciertos rastros de cáncer que circulan en el
torrente sanguíneo, lo que ofrecería una alternativa para mejorar el tratamiento de la
enfermedad.
El dispositivo puede aislar, contar y analizar células tumorales en circulación
en una muestra sanguínea, expresó el equipo del Hospital General de Massachusetts y la Escuela de
Medicina de Harvard, en Boston.
Estas células tumorales en circulación, o CTC, son los fragmentos más pequeños
de los tumores que se transportan en la sangre.
Los médicos saben de su existencia desde hace algún tiempo, pero debido a que
son muy escasas y frágiles, son difíciles de atrapar y estudiar de manera significativa.
“Lo que hace nuestra tecnología es incrementar muchas, muchas veces la
sensibilidad, al punto en que puede convertirse en una herramienta de uso clínico”, dijo
Mehmet Toner, cuyo grupo desarrolló el dispositivo.
Toner agregó que el control rutinario de estas células podría ayudar a los
médicos a ajustar el tratamiento a cada paciente y, algún día, asistir en el diagnóstico.
“Nueve de cada 10 muertes por cáncer se deben a procesos metastáticos
porque el tumor se esparce a otras partes del cuerpo”, indicó Toner, cuyo estudio fue
publicado en la revista Nature.
“Esas son las células que en realidad terminan provocando la muerte de las
personas”, añadió el autor.
Las actuales pruebas sanguíneas para detectar las células tumorales en
circulación involucran muchos pasos de mezclado y agitación, lo que suele causar la muerte de las
pocas CTC halladas.
El nuevo dispositivo usa un chip de silicona del tamaño de una tarjeta
profesional y tiene puntos microscópicos cubiertos con anticuerpos que reconocen las células
cancerosas.
Al circular la sangre sobre el chip, estos puntos actúan como goma de pegar,
atrapan las células cancerosas y dejan atrás las células sanguíneas.
Los métodos más antiguos pueden obtener entre una y cinco células de 60.000 millones analizadas
en un tubo de sangre de 8 mililitros. El nuevo mecanismo puede hallar 1.000 células cancerosas.
Los investigadores probaron su chip en muestras de sangre de 68 pacientes con cinco tipos de
cáncer: pulmonar, prostático, mamario, pancreático y colorrectal.
De 116 muestras, los investigadores hallaron células tumorales en circulación en todas excepto
una, mientras que no encontraron células cancerosas en la sangre extraída a personas saludables.
(Reuters)