El gobierno de Brasil solicitó ayer a Estados Unidos la extradición de Frederik Barbieri, el brasileño a quien las autoridades de su país acusan de ser el mayor traficante de armas del gigante sudamericano y quien fue detenido anteayer por autoridades estadounidense en su casa en Miami.
El pedido de extradición fue confirmado en un comunicado emitido ayer por el Ministerio de Justicia del país sudamericano, en el que informó que "(.) el pedido de extradición de Frederik Barbieri ya fue presentado al gobierno estadounidense", aunque aclaró que el trámite está demorado debido a que las autoridades Estados Unidos pidieron documentación complementaria.
Agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) detuvieron anteayer a Barbieri en su domicilio de Miami.
Fabrício Oliveira, titular de la Comisaría Especializada en Armas, Municiones y Explosivos de la Policía Civil del Estado de Río de Janeiro, explicó a dpa que la detención del presunto traficante de armas se debió a una colaboración de la Policía de Brasil y de los Estados Unidos.
Las autoridades brasileñas acusaron a Barbieri de haber enviado en mayo del año pasado desde el país norteramericano 60 fusiles a Río de Janeiro escondidos una carga de calentadores para piscina.
Las armas fueron aprehendidas en el aeropuerto internacional de esa ciudad, en lo que para la policía fue el decomiso de fusiles más importante en un terminal aeroportuaria de Brasil en la última década.
"Desde el momento de ese decomiso en mayo comenzó una investigación en conjunto de la Policía Civil de Río y la ICE estadounidense. Esa unión de esfuerzos logró que Barbieri fuera preso y permitió que también fuera decomisada una carga de pero lo menos 40 fusiles y de otras armas de guerra", declaró Oliveira.
Sobre el presunto traficante de armas, nacido en Río de Janeiro, pesan dos órdenes de arresto en Brasil: una de la Justicia Federal del nordestino estado de Bahía por tráfico de municiones, mientras que la otra es de la Justicia Federal de Río, precisamente por el decomiso de fusiles de mayo.
Sobre la solictación de extradición, Oliveira cree que es muy difícil que se concrete porque Barbieri obtuvo la ciudadanía de Estados Unidos. "Como se naturalizó estadounidense es un procesoso muy difícil. Lo normal es que sea procesado y que cumpla pena allá", puntualizó Oliveira. Asimismo, la policía brasileña también detuvo en agosto a 11 personas vinculadas con el decomiso, entre ellas al hijo de Barbieri, Joao Felipe.
Barbieri era buscado por la policía brasileña desde hace ocho años, cuando fue decomisada una carga de municiones para fusiles en el puerto de la ciudad de Salvador, capital del estado de Bahía. Entonces, según Oliveira, Barbieri huyó a Estados Unidos, donde se naturalizó estadounidense.
En 2015 fue emitida una orden de arresto en contra de Barbieri y la Fiscalía del país sudamericano solicitó a la Justicia local que fuera incluido en la lista de buscados por Interpol. Sin embargo, el pedido fue denegado porque el presunto traficante de armas tenía un domicilio declarado en Estados Unidos.