Tras el impacto los médicos constataron que el chico tenía siete fracturas en el cráneo y, desde el primer momento, avisaron a sus familiares que, si sobrevivía, nunca volvería a ser el mismo.
Pasaron los días y los padres no vieron signos de recuperación, por lo que decidieron firmar los papeles para autorizar la donación de sus órganos.
"Cinco niños necesitaban órganos que coincidieran con él", contó su madre, Jennifer Reindl, quien añadió: "Fue injusto seguir haciéndolo regresar, porque solo estaba dañando sus órganos aún más".
Luego de dos meses, cuando los doctores habían anunciado que retirarían el soporte vital a Trenton, el nene comenzó a mostrar signos de actividad cerebral y movimiento.
El chico empezó a respirar por sí mismo y se despertó hablando frases completas, describió su madre en Facebook en una página de recaudación de fondos. "No hay otra explicación más que Dios", señaló la mujer.
La buena noticia, sin embargo, no deja de llevar preocupaciones en el camino hacia la recuperación ya que el menor sufre dolores nerviosos y convulsiones diarias.
Además, fue sometido a tres cirugías cerebrales y tendrá otro procedimiento para volver a conectar la pieza faltante de su cráneo.
Respecto al accidente, Trenton relató: "Golpeé el pavimento y el trailer cayó sobre mi cabeza" y "después de eso no recuerdo nada ".