Imputado por balear a mansalva a tres jóvenes
Le dicen "Labio leporino" y lo acusan de ser soldado de la banda "Los Romero". Le adjudicaron el intento de asesinato de tres chicos disparando desde un auto

Jueves 17 de Enero de 2019

Hugo Emanuel V., de 30 años, alias "Labio Leporino" y ligado a la banda del convicto Lichi Romero que ostenta poder a fuerza de violencia en los barrio Nuevo Alberdi y Municipal en el norte de Rosario, fue imputado ayer por intentar matar a tiros a dos adolescentes y un joven, además de por amenazas coactivas y tenencia de arma de guerra. Además le endilgaron amedrentar a vecinos de la zona que son víctimas de usurpaciones de viviendas, hecho por el cual una hora antes fue imputado Franco "Sordo" V., otro integrante de la banda (ver página 29).

Las peligrosas y violentas actividades que despliega hace varios años una gavilla cuyos integrantes responderían a la voz de mando de Lichi Romero quedaron en evidencia ayer en la audiencia imputativa contra uno de sus brazos ejecutores, Hugo Emanuel V.

Disparos a granel

El hombre quedó detenido el lunes acusado de varios hechos. En una audiencia celebrada ayer en el Centro de Justicia Penal (CJP), el fiscal Ademar Bianchini (en reemplazo de Marisol Fabbro) le atribuye el intento de asesinato de Enzo Ismael H., de 14 años, Santiago C., 15 años, y Maximiliano A., de 24 años, el 7 de junio de 2018 a las diez de la noche en Larrechea y Avalos.

Según la hipótesis fiscal, las víctimas estaban en esa esquina cuando Labio Leporino se presentó en el lugar en un auto Fiat Duna celeste junto a Diego V., de 32 años, y Ramón Salvador V., de 54, quienes sacaron armas de fuego y dispararon a mansalva una ráfaga de proyectiles 9 milímetros.

Santiago resultó con una herida en el muslo derecho, Maximiliano en la rodilla derecha, mientas que Enzo Ismael se llevó la peor parte, ya que resultó baleado en tórax y fue trasladado por allegados al Hospital Alberdi en un auto y acompañado por una moto. Luego fue derivado al Hospital Baigorria, en donde pudo reponerse.

Los agresores escaparon en el auto en que llegaron, pero decidieron desprenderse del mismo. Lo abandonaron y le prendieron fuego en Larrechea al 2400. Luego se subieron a un Fiat Uno blanco en el que continuaron escapando. En la esquina de la balacera la brigada científica de la Policía de Investigaciones (PDI) recogió ocho vainas servidas calibre 9 milímetros.

El relevamiento de declaraciones testimoniales de vecinos y testigos que apuntaron por ese hecho directamente a "la banda de los Romero del Municipal" (por el barrio) fue parte importante de la evidencia que exhibió el fiscal ayer ante la jueza María Trinidad Chiabrera y el propio imputado, que estuvo casi en silencio acompañado de su defensor público Juan Pablo Nardín.

Trasfondo narco

Respecto a los roles, Bianchini remarcó que Diego V. conducía el auto, Ramón "Monchi" V. iba atrás con muletas, y entre ellos Labio Leporino como ocupante y uno de los tiradores. Sobre las motivaciones del ataque, mencionó la puja territorial por la venta de estupefacientes.

Para sostener su hipótesis el fiscal dijo contar con la transcripción de intervenciones telefónicas de cuya interpretación se desprende que el ataque estuvo claramente relacionado con la comercialización de droga. Y ubican al imputado con una boca de expendio de estupefacientes en la esquina de Larrechea y Cavia.

Según Bianchini, el ataque se produce porque en realidad estaban buscando a otra persona identificada como Franco G., que según los investigadores abastecía de droga a una joven que vendía en Larrechea y Avalos, a una cuadra del negocio que supuestamente regentado por Labio Leporino.

No sería el último ataque a balazos contra la vivienda de Larrechea y Avalos. Uno de los últimos tuvo un resultado lastimoso. Ocurrió el 5 de julio a la madrugada cuando uno de los proyectiles dirigidos a la fachada de la vivienda se coló por una puerta de chapa e hirió mortalmente a Maite Ponce, una niña de 5 años que dormía en un sillón.

Lazos de familia

Una aclaración importante respecto a los vínculos familiares y nombres propios que hizo el titular de la acusación es que si bien en ese y otros hechos Hugo V. aparece identificado como Hugo Romero, eso se explica porque su madre es Mónica Patricia Romero, tía de Lichi Romero, por lo que Labio Leporino es primo del supuesto líder de la banda.

En julio de 2018 fueron detenidos imputados por el primer hecho Diego V., de 32 años, y Ramón V., de 54 años, hermanos de Labio Leporino. En su poder se les incautó el auto en el que huyeron del ataque. A ambos les adjudicaron los delitos de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y portación ilegítima de arma de fuego de uso civil, y le dictaron la prisión preventiva hasta el 5 de marzo.

El mismo delito en calidad de coautor le adjudicó Bianchini ayer al tercer implicado. Pero además, le achacó otros hechos como amenazas coactivas agravadas y portación ilegítima de arma de fuego de guerra.

Lo relacionaron a un hecho ocurrido el 17 de septiembre del 2017 cuando junto a otra persona se presentó en una casa de Bouchard 3300 portando armas de fuego, y bajo amenazas de muerte exigieron 10.000 pesos a sus moradores para no usurparla.

Por una maniobra similar aunque como instigador de Franco "Sordo" V., (ver aparte) se lo acusó de amenazar a otra familia domiciliada en Luzuriaga al 3900. Según la pesquisa, el objetivo era apoderarse de inmuebles para la venta de droga.

La jueza Chiabrera aceptó la calificación presentada por la Fiscalía y dictó prisión preventiva efectiva hasta 5 de marzo del 2019, cuando se cumple el plazo de la medida cautelar impuesta a los otros coautores.

Lichi Romero, acusado de líder de la banda, espera condena por diversas entraderas y robos, como el asalto a la galletitería Tyna cometida por una banda armada en 2017. Además su grupo está acusado por lavado de activos provenientes de la actividad delictiva.