Una poeta de Aries

La poeta chilena, Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy, conocida como Gabriela Mistral, nació en Vicuña el 7 de abril de 1889 (la hora se desconoce) . Fue la primera latinoamericana y la primera escritora en ganar el Premio Nobel de Literatura, en 1945; se la llamó “ la reina de la literatura latinoamericana ”.

Hija de un maestro de escuela, con 16 años, Gabriela Mistral, decidió dedicarse también a la enseñanza; trabajó como profesora de secundaria en su país y como directora de escuela, también hizo colaboraciones periodísticas (su vida intelectual fue muy fecunda).

Su signo solar era Aries, signo de fuego, masculino y cardinal, que le dio una personalidad emprendedora e independiente. Aries es un signo que da batalla y que abre nuevos caminos. Mercurio, el planeta de la comunicación, también en este signo le otorgó una mentalidad muy activa, directa y frontal, se podría decir “sin pelos en la lengua”.

Marte, el planeta regente de Aries en Tauro, y Venus también en Tauro, podrían dar cuenta de su perseverancia porque Aries, signo de una gran fuerza inicial, puede ser inconstante.

Su niñez estuvo marcada por la ausencia del padre, quien abandonó a su familia cuando Gabriela todavía usaba pañales. En la carta natal, la Luna que representa la parte emocional, la sensibilidad y la infancia está en Cáncer, signo afectivo, maternal y protector.

Su labor literaria comenzó a reconocerse en 1914 al ganar un prestigioso concurso literario. “Los sonetos de la muerte” nacieron del dolor causado por el suicidio de su prometido, el empleado ferroviario Romelio Ureta, a quien había conocido en 1906. En 1922 fue publicada su primera obra y desde entonces viajó por numerosos países de América y Europa.

En sus obras expresó temas como el sufrimiento o la maternidad frustrada e inquietudes religiosas y sociales que responden a su ideología cristiana y socialista. México le brindó el aprecio que por momentos Chile le negó. Allí se quedó casi dos años, trabajando con los intelectuales más destacados de habla hispana. En México, Gabriela Mistral fundó la escuela que lleva su nombre y colaboró en la organización de varias bibliotecas públicas, además de componer poemas para niños.

En Europa fue representante de la Liga de las Naciones, siendo una de las pocas mujeres que llegaron a ese cargo. Obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1945 como un justo reconocimiento a su producción poética y a su dedicación por la difusión de la cultura y la lucha por la justicia social y los derechos humanos.