Villa G. Gálvez.— Entre bombos, pancartas y simpatizantes de las distintas tendencias, los nuevos concejales en esta ciudad asumieron sus cargos en el cuerpo, que quedó bajo la presidencia del histórico dirigente Pedro González.
Villa G. Gálvez.— Entre bombos, pancartas y simpatizantes de las distintas tendencias, los nuevos concejales en esta ciudad asumieron sus cargos en el cuerpo, que quedó bajo la presidencia del histórico dirigente Pedro González.
Un fuerte operativo policial contuvo los roces entre los partidarios del PJ y los del Frente Progresista, y todo se desarrolló en relativa calma, aunque González, al despedirse, pidió tranquilidad, dijo que esa era una "fiesta de la democracia" (algo con lo que coincidió después el intendente Jorge Murabito), y llamó a "hablar con la gente: los negritos también entienden, hay que sabérselo explicar nada más", dijo al mejor estilo patriarcal.
González juró por Dios, la Patria y por la ciudad de Villa Gobernador Gálvez y su gente. En su discurso, aclaró que con el intendente "no somos enemigos, pensamos diferente, somos de otro partido, pero vamos a coincidir en todo lo beneficioso para la ciudad y la gente". Prometió no trabar nada y trabajar en beneficio de la ciudad y acompañar en lo necesario.
Murabito, por su parte, manifestó: "Vamos a expresar nuestras diferencias y consensos para que la ciudad siga adelante". Felicitó a González por obtener la presidencia, aunque consideró que su fuerza "debería tener un mayor espacio en el Concejo, pero democráticamente se dio así".
Autoridades. El concejal Adrián Orellana, del Frente Progresista, fue la única autoridad proclamada por unanimidad como vicepresidente segundo, ya que el gonzalismo impuso a Roberto Richetti como vicepresidente primero y logró la presidencia para González. Se abstuvieron los ediles del Frente Progresista (Orellana, Dolce, Fraccaroli y Monte).
El Cuerpo Deliberativo quedó conformado de la siguiente manera, por el Frente para la Victoria, entran Pedro González, Norma Auge, Héctor López y continúan Roberto Richetti y Miguel Prece; por el Frente Progresista ingresan Miguel Monte y Carlos Dolce y continúan Adrián Orellana y Ramón Fraccaroli.
De esta manera, González, quien fuera intendente durante tres períodos y que perdió ese lugar contra el mismo Murabito, vuelve a la función pública, esta vez como concejal. Es un viejo caudillo de la ciudad. Su regreso generó algún temor dentro del Ejecutivo de que se viera resentida la gobernabilidad. Ahora habrá que ver si el Justicialismo, como dijo el mismo González, acompaña "en lo necesario".