Es una modalidad de ejercicio que utiliza cintas de nailon resistentes de medida regulable con un enganche que se fija a bastante altura, las cuales cuentan con un agarre para las manos o pies, en función del tipo de ejercicio que se pretenda realizar.
El entrenamiento funcional suspendido ha revolucionado la forma de abordar el fitness. Va mucho más allá de simplemente desarrollar fuerza y resistencia. Una de sus ventajas más notables es su capacidad para mejorar la postura y la estabilidad. Los ejercicios en suspensión requieren una alineación adecuada del cuerpo en todo momento, lo que lleva a una corrección natural de la postura y una mayor estabilidad en la columna vertebral y las articulaciones.
La versatilidad del entrenamiento suspendido lo hace adecuado para personas de todos los niveles de condición física. Sus correas ajustables a distintas alturas permiten aumentar o disminuir la resistencia, lo que lo convierte en una herramienta efectiva tanto para principiantes como para atletas de alto rendimiento. Además, la amplia variedad de ejercicios disponibles asegura que el entrenamiento nunca sea monótono.
En el Instituto Mirta de Fussi se ofrecen clases para grupos reducidos adaptadas a las necesidades de sus alumnos.
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