Su humor es atípico, sano, cotidiano. Será por eso que Lo Lumvrise supieron ganarse el respeto del público rosarino a través de sus quince años de trayectoria en el universo de la comicidad. Ellos son Pablo "Pachi" Fontana, Hernán "Negro" Cigno y Damián "Pelu" Taborda, fieles representantes de la idiosincracia local. Ya la elección del nombre del grupo delata su impronta. "Lo pusimos sin la ese riéndonos de nosotros los rosarinos que nos comemos las eses de las palabras", destacó Pachi en diálogo con Escenario antes del gran estreno de "El humor es ciego", el nuevo show del grupo que tendrá lugar hoy, a las 22, en el teatro Broadway (San Lorenzo 1223).
El grupo comenzó en 1999 como una reunión de amigos que -aún cursando la secundaria- se disponía a ejercer el arte de hacer reír. A partir de esa premisa, los actores rosarinos presentaron varios espectáculos en formato de cuarteto con Andrés "Veto" Rovetto, que abandonó el grupo a principios de este año. Así pasaron los shows "Esspertos en parejas", "Hasta que la tele nos separe" y "4 tipos de humor", todos de su propia autoría, producción y dirección. "El humor es ciego" es el primer espectáculo en formato trío, que intenta fusionar todos los estilos de humor en un sólo show.
Además, el grupo formó parte del elenco de "Stravanganza, Estados del Tiempo", el espectáculo encabezado por Flavio Mendoza, durante el 2013 y 2014, donde fueron vistos por más de de 300 mil espectadores. Obtuvieron numerosos galardones como el premio Estrella de Mar en 2010, 2011 y 2012, y el Carlos en 2013.
La invitación es sorpresiva: "Ahora sí, es mi última advertencia. Este sábado presentamos nuevo show en el Broadway, comprá tu entrada porque van los siguientes famosos: Maradona, El Papa, Shakira, Batman, Gardel, Rambo, Frank Sinatra, Wolverine y otros", publicaron en su cuenta de Facebook. Una buena opción para empezar el domingo de elecciones con una sonrisa en la cara.
—¿Cómo va a ser este nuevo show de Lo Lumvrise?
—Es el estreno en Rosario ya que lo venimos haciendo en los alrededores. Tratamos de probarlo varias veces antes de llevarlo al Broadway para que quede bien pulido para mostrarlo a nuestro público. El show es un repaso por todos los estilos de humor que existen. Muchos nos preguntan qué tipos de humor hacemos, si cantamos como Les Luthiers por ejemplo, y nos agarramos de eso para crear este nuevo espectáculo. Como resultado, nació "El humor es ciego", que reúne aspectos del humor mudo, el humor musical, el humor circence, el stand up y el transformismo, ¡todos los estilos que existen! Abarcamos todos los tipos de humor pero desde la parodia, lo divertido del espectáculo es que todo lo que intentamos hacer nos sale mal.
—¿Cómo son los entretelones de las funciones? ¿Tienen alguna cábala antes de salir a escena?
—Somos muy pavotes, no paramos de jugar, salvo que estemos muy cansados. Por ahí está uno sentado fumando un cigarrillo y el otro se acerca haciendo de policía y pidiéndole la identificación, y así surgen muchos personajes nuevos. Nuestra cábala es jugar un piedra-papel-tijera antes de la función, lo hacemos entre los cuatro, con nuestro manager Damián Fortunato. Somos tres niños y eso es lo que nos mantiene unidos. Si te dedicás a hacer reír a la gente, no podés estar hablando de política en el camarín. Jugamos desde el viaje hasta que termina la función.
—Se dice que los humoristas suelen ser malhumorados en su vida real, ¿cómo es tu caso?
—Tengo una teoría sobre eso. Mis compañeros Pelu y el Negro está todo el día jodiendo, ¡no los aguanto más! Hacen chistes hasta cuando jugamos al fútbol o comemos un asado. En mi caso, siempre tengo buena onda. Siempre me piden que cuente un chiste, "¡contate uno de gallegos!", me dicen. Pero jamás cuento chistes. Hay que tener buena onda siempre, pero la gente tiene que saber que no siempre vamos a tener un chiste en la galera. Cuando termina la función, nos quedamos en el teatro sacándonos fotos con todo el público, tenemos re buena onda con ellos.
—¿Cómo nació el nombre del grupo?
—Estamos bastante arrepentidos del nombre que nos pusimos porque suelen confundirlo. Una vez, cuando subimos a recibir un premio nos presentaron como Las vinchucas, ¡fue terrible! (risas) El nombre surge porque Pelu, que vive en zona sur, leyó un cartel que decía "se venden lombrice", nos dio mucha risa, y le pusimos más errores de ortografía todavía, y dijimos "vamos con eso". Eramos muy chiquitos, teníamos 17 años, íbamos al colegio todavía. Incluso lo pusimos sin "s" riéndonos de nosotros los rosarinos que nos comemos las eses de las palabras.
—¿Cómo es vivir del humor en Rosario?
—Ahora estoy viviendo en Capital, me casé y tuve hijos porteñitos. En 2013 y 2014 estuvimos con "Stravaganza" y en 2015 volvimos con toda e hicimos temporada de verano en Mar del Plata. También hicimos temporada en el teatro La Plaza de Capital. Creo que todo lo que logramos lo hicimos golpeando puertas, insistiendo logramos estar donde estamos. Nuestro mayor ingreso viene de Rosario y alrededores, lo más difícil es entrar en la movida de Capital. Por ejemplo, este sábado (por hoy) vamos a presentarnos en el Broadway ante 1200 personas, y al otro día, vamos a hacer el mismo show, por supuesto sin escenografía, en un bar en Capital. El secreto de haber durado tanto es que queremos todos lo mismo, somos una secta linda. Por eso cuando sentís que no das más, tenés un compañero al lado que te tira buena energía para seguir. En veinte años no fue todo rosa, pero logramos estar donde estamos gracias al esfuerzo y los sueños.
—Estuvieron con "Stravaganza, Estados del tiempo" haciendo temporada, ¿cómo fue esa experiencia? ¿Flavio Mendoza es un jefe exigente?
—Pensé que Flavio era un escandaloso que aparecía peleando en "Intrusos", y me di cuenta que es un monstruo que sabe de todo, desde baile, sonido, escenografía. Tiene un ojo en cada punta del escenario. Fuimos con la idea de aprender de la experiencia. Aunque creo que estar en "Stravaganza" no fue un antes y un después para el grupo porque ni siquiera nos dejaban usar el nombre Lo Lumvrise. Por contrato no podíamos mencionar el nombre del grupo. Así que nos teñimos el pelo de colorado para que la gente nos identifique con eso y nos decían "qué buenos los coloraditos". Flavio es la exigencia en persona. Con los bailarines es muy estricto. Pero gracias a eso tiene el éxito que tiene.
—¿Cuáles son los referentes humorísticos del grupo?
—Nos encantaría ser como ninguno. Tratamos de tener un estilo propio. Cada uno tiene sus gustos particulares pero el referente que tenemos los tres en común es El Chavo del 8; tiene un humor muy sano que hace reír desde un niño de 4 años hasta un adulto. Nos gustan Les Luthiers, Francella, Favio Posca. Creo que aunque uno no quiera, se deja influenciar por los referentes.
—¿Cómo es el humor de Lo Lumvrise?
—Me guío mucho por lo que dice la gente. Podría compararnos con Midachi pero en otra época. Dady Brieva dice que ellos eran los primeros en la cola hace 30 años atrás porque no había otro grupo. Yo siento lo mismo con nosotros, porque lo que hacemos es distinto a una comedia o a una revista. Somos tres amigos que se divierten en el escenario como si fuese en el living de su casa. La gente se da cuenta que no contamos chistes como maquinitas y que nos hacemos reír el uno al otro. No escupimos un guión esperando que se pase la hora y media de show, disfrutamos de verdad. Eso se transmite al público y se agradece.
—Y más en este momento de elecciones...
—¡Mirá la fecha que nos tocó! Pero mejor, porque no se puede salir, así que te vas al teatro, ves la función, te divertís y después te vas tranquilo a dormir para despertarte tempranito e ir a votar. Y mientras estás esperando para meter el voto en la urna, te acordás del chiste de Lo Lumvrise.
La salida de Veto
“Lo que más vamos a extrañar es el detrás de escena; los viajes de los cuatro en el auto o los chistes de Veto en el camarín”, destacó Pachi.