Las súper estrellas globales, Niall Horan, Zayn Malik, Liam Payne, Harry Styles y Louis Tomlinson presentan su debut en la gran pantalla: "One direction: así somos", que se estrena hoy en los cines argentinos. Más que sólo conciertos grabados y un documental de la gira, ésta es una oportunidad de estar cerca y tener contacto personal con la banda más famosa del mundo. Filmada mientras los jóvenes realizaban su gira mundial en los estadios alrededor del planeta, desde México hasta Japón y en la famosa O2 Arena de Londres, la película mezcla entusiastas interpretaciones, sinceras entrevistas y escenas tras bastidores que ofrecen una perspectiva única en su clase sobre el talento, el trabajo duro y la diversión que implica formar parte de One Direction. Esta es una historia notable de orígenes modestos, un ascenso a la fama sin precedentes y un fenómeno impulsado por los fans que permitió a One Direction conquistar el mundo.
HISTORIA DE UN ÉXITO. En el verano de 2010 Horan, Malik, Payne, Styles y Tomlinson se inscribieron al programa de talentos más grande de Gran Bretaña, "The X Factor", como excelentes artistas individuales. En una etapa posterior Simon Cowell, juez de X Factor, ofreció a los chicos la oportunidad de permanecer en el concurso como grupo. "Observé a cinco solistas que eran cinco estrellas, pero podrían ser más fuertes en un grupo, fue así de sencillo", explica Cowell, productor de "One direction: así somos". Con el nombre de One Direction fueron una sensación instantánea. Una banda de chicos talentosos y frescos que conquistaron de inmediato a un país de chicas.
Los fans respondieron por millares, inundaron los medios sociales, esperaron durante horas fuera de los estudios de televisión y votaron por los chicos en cada ronda del concurso hasta llegar al gran final. Aunque quedaron en tercer lugar ellos supieron instintivamente que eso no era lo último que el mundo vería de ellos.
Rápidamente, la banda firmó con Syco Records, la disquera de Cowell, su mentor de "X Factor", y pronto empezaron a trabajar en la grabación de su primer álbum. El libro Forever Young, que narró su experiencia en el camino, ocupó directamente el número 1 en la Lista de Best Sellers de The Times.
"Up All Night", el álbum debutante de la banda, se estrenó en octubre de 2011 y tuvo un éxito instantáneo. Su primer sencillo, "What Makes You Beautiful", ya se había convertido en el sencillo con más altas pre-órdenes en la historia de Sony Music. El álbum se convirtió también en un éxito nunca antes logrado por una banda británica: ocupar el número uno de Billboard con su primera grabación. "Take Me Home", el segundo álbum de la banda, transformó a 2012 en un año impresionante para los chicos. En julio estrenaron "Best Song Ever", una pista escrita específicamente para la película. El divertido y pícaro video de la canción rompió récords en VEVO con 12.4 millones de vistas en un día. Durante la gira surgió la idea de realizar una película.
El director del filme, Morgan Spurlock consideró que los jóvenes eran encantadores, pero también muy sensatos acerca del fenómeno que experimentaban. "Eran divertidos, pero increíblemente equilibrados a pesar de la locura que rodeaba sus vidas cada día. Esto fue algo que de verdad me agradó de ellos", resaltó Spurlock. Y no era suficiente, añadió Spurlock, que fueran "cinco apuestos jóvenes que formaban una banda. Eso ocurre todo el tiempo. Pero que tuvieran talento genuino, así como la capacidad y el impulso para llegar tan lejos y continuar avanzando, era muy notable".
Spurlock filmó en diversos lugares durante casi seis meses, incluyendo la presentación de la banda en la Ciudad de México a principios de junio de 2013. El rodaje variaba en todos lados, desde Spurlock solo sosteniendo una cámara, incluso sin una persona de audio a su lado, hasta filmaciones de conciertos totalmente coordinadas que, en palabras del director, formaban "un ejército de personas". Simplemente filmar las presentaciones de la banda en O2 fueron trabajos masivos para una persona que solía filmar de forma más directa la mayoría de sus documentales. "Probablemente trabajamos como 250 personas para filmar el concierto en el O2, fue algo enorme".
La película incluye registros de que abarcan toda la gama de emociones, desde las travesuras detrás del escenario antes del espectáculo hasta cálidas escenas caseras, como Harry trabajando en la panadería familiar, estos momentos por sí mismos sumaron cerca de 500 horas de material.
Lo que emergió finalmente del proceso de edición fue la sensación de que los cinéfilos tendrán un vistazo privilegiado de la vida de los miembros de la banda. "De verdad sientes como si te convirtieras en parte de este viaje y estos chicos y esta banda", agregó Spurlock. Incluso podría generar nuevos fans, sugiere. Acerca de la decisión de filmar en 3D los conciertos realizados en O2, Cowell comenta que es "increíble. La 3D es sensacional. De verdad te hace vivir el concierto como si estuvieras ahí". "Los chicos de One Direction entendieron que era una oportunidad para documentar un momento especial en sus vidas. Se dieron cuenta de que la película es una cápsula de tiempo", concluyó Spurlock.