El dramaturgo Jacobo Langsner, de larga trayectoria en el teatro uruguayo y autor de grandes éxitos en el cine argentino, como “Esperando la carroza”, murió ayer a los 93 años.
El dramaturgo Jacobo Langsner, de larga trayectoria en el teatro uruguayo y autor de grandes éxitos en el cine argentino, como “Esperando la carroza”, murió ayer a los 93 años.
Nacido en Rumania pero criado en Uruguay, el escritor es responsable de títulos como “Darse cuenta”, “El agujero en la pared” y “Besos en la frente”, entre otros filmes; como así también por obras de teatro como “Locos de contento” y ciclos televisivos de la talla de “Alta comedia” y “Atreverse”.
Previo a su consolidación profesional definitiva en nuestro país con la obra “El tobogán”, en 1970, Langsner había desarrollado una larga trayectoria en la escena teatral uruguaya, con piezas interpretadas por figuras como China Zorrilla. Sin embargo, fueron los diálogos creados en la famosa comedia dirigida por Alejandro Doria los que le valieron su trabajo más aclamado; algo ratificado en el gran número de latiguillos extraídos de ese libreto por el habla popular.
El escritor había iniciado su carrera a principio de los años 50 a partir de su participación en la escena teatral independiente uruguaya, con títulos como “El hombre incompleto”, “La rebelión de Galatea” y “Los ridículos”, entre otros. En 1958 se radicó en Buenos Aires, en donde continuó con su actividad hasta alcanzar el reconocimiento con “El tobogán”.
En aquellos años también creó “Esperando la carroza”, su obra más famosa, la cual tendría una versión televisiva en un capítulo de “Alta comedia” y algunas adaptaciones teatrales, aunque debería esperar hasta mediados de los 80 para su consagración en el cine.
Antes, en 1975, el escritor debió exiliarse en Madrid, en donde también llevó al teatro el que sería su texto más reconocido, junto con “Paternoster”.
Su regreso al país coincidió con la vuelta de la democracia y le deparó su etapa de mayor reconocimiento popular, con una gran cantidad de títulos suyos en el cine, en muchos casos con la participación actoral de su gran amiga China Zorrilla.
“He tenido actores que me han mejorado y actores que me han empeorado. A estos últimos no los nombro, pero Miguel Angel Solá, por ejemplo, me mejoraba todo. Graciela Dufau me mejoraba todo. Una sola película hice con ella, era “Sofía”, que fracasó porque el estreno fue aquel día de “La casa está en orden, felices pascuas”. Estábamos con Alejandro Doria, que la había dirigido, y los actores en la premiere y todos salimos del cine y nos fuimos a Plaza de Mayo”, contaba una y otra vez Jacobo.
El trabajo de Langsner fue merecedor de galardones en el rubro teatral, cinematográfico y televisivo; aunque nada igualará el hecho de que tantos argentinos recuerden diálogos suyos textuales que tomaron popularidad en las actuaciones de Luis Brandoni y China Zorrilla, entre otros.