"La verdad es que Tinelli fue una gran decepción en mi vida. Hoy, por suerte, ya no es nada", sentenció finalmente Ortega respecto al conductor, a quien llegó a considerar como un amigo luego de trabajar juntos.
No fue sólo para evitar el tema Tinelli-Valdes que Ortega durante mucho tiempo evitó dar entrevistas, sino que confesó que su relación con la fama es mala y que cada vez que hace una nota, la pasa muy mal: "No me gusta verme en las revistas y, si lo hago, me gusta que sea para hablar de trabajo, que no tengan que ver con quién estoy de novio ni de quién me separé".
Es por eso que además, considera que su relación con la gente no es a través de los medios, sino a través de sus programas.