Pablo Echarri, protagonista junto a Mónica Antonópulos y Leticia Brédice de “Arrebato”, el filme de suspenso de Sandra Gugliotta que llegará este jueves a las salas de cine, admitió tener predilección por los “personajes violentos y oscuros que pierden la cordura”. “Venía de la mano de Sandra Gugliotta, que tiene una forma muy personal de filmar y una gran capacidad para generar climas. Se le ven ciertos instrumentos de thriller o de policial y es un personaje que me ofrecía un arco de transición muy interesante, un personaje oscuro”, expresó Echarri.
“Los papeles que me permiten interpretar hombres que se hunden en las tinieblas, que van de la claridad a la oscuridad son los que más me gustan, los que me conectan con un goce directo como actor”, confesó Echarri sobre el carácter central de su personaje Luis Vega. “El cine -añadió- me está abriendo la posibilidad de hacer papeles más humanos, alejados de los héroes que suelen tocarme en la televisión y, en este momento, la nobleza, la transparencia y la bondad en la actuación me aburren un poco”.
A partir de este jueves, “Arrebato” reúne a la triada que impactó en la TV con “El elegido” (2010): Echarri, Brédice y Antonópulos, para exponerlos en un policial que promete altas dosis de intriga, violencia y misterio.
Básicamente, la trama creada por la responsable de los filmes “La toma”, “Vidas posibles” y “Un día de suerte”, se centra en la vida de Luis Vega, un profesor de literatura y escritor un tanto frustrado que encuentra en un caso policial mediático la historia que estaba buscando para su próxima novela.
Se trata del inexplicable asesinato de Grodzki, un dentista sin enemigos aparentes y una intrigante esposa (Brédice) a quien todos miran: aún sin pruebas, es la única señalada como posible responsable del crimen. Y será en medio de la investigación del caso, con el objetivo de darle verosimilitud a su futuro libro, que Vega empieza a involucrarse de forma personal con los protagonistas de esta historia.
“Poco a poco a mi personaje se le empiezan a confundir los límites entre la ficción y la realidad, porque empieza a ver similitudes entre el caso que aparece en la televisión y el comportamiento de su mujer (Antonópulos)”, explicó Echarri sobre el espiral de paranoia que va tiñendo de a poco la vida de Luis Vega.
Así, el triángulo que se forma entre Luis, su esposa y la viuda, condimentado por los celos, la desconfianza y algunos matices que va adquiriendo la locura, empuja a Luis Vega a cruzar un límite impensado. “Es difícil saber qué contenido de violencia encierra tal o cual persona sin antes verlo vivir ciertos grados de obsesión. La inseguridad y la sospecha de traición pueden generar un dolor muy fuerte y generar una realidad virtual”, indicó el actor sobre el filme cuyo elenco completan Claudio Tolcachir y Gustavo Garzón.
“Lo que me parece atractivo -continuó- es ver cómo el ser humano está mucho más cerca de un arranque de violencia de lo que uno cree. La gente, en determinados estados, es capaz de reaccionar de forma imprevisible”. Los celos son un tema clave en este policial y con respecto a esto, Echarri asumió: “A mis 44 años he transitado muchos aspectos de los celos. He nacido celoso profundo, obsesivo, pero me he lastimado mucho. Me fui dando cuenta de que, en la medida de dejarlos que vivan con total libertad, las consecuencias pueden ser graves y se la pasa mal. He trabajado mucho con los celos a través de la confianza. Cambió mucho cuando conocí a mi esposa”. Con respecto a su relación con Nancy Dupláa, que ya lleva 14 años, el actor aseguró que “hay que trabajar, buscar, tener mucha confianza y generar un vínculo interno, ser cómplices”. “Venimos de lugares parecidos a nivel socioeconómico, y me parece que eso se nota. Dos familias diferentes pero muy buenas, donde hubo amor, y uno tiende a no querer cambiar esa esencia”, resaltó .
Por otro lado, Echarri adelantó cómo será el proyecto que realizará junto a Nancy Dupláa el próximo año: “Es un culebrón. La historia comienza con la toma de una fábrica con una líder a la cabeza que es ella. Yo soy un personaje que viene con un misterio a vengarse de su supuesto padre y a tratar de robarle esa fábrica. Por supuesto van a haber intereses encontrados pero una atracción física casi animal. Todavía no están los ganchos, pero comenzaríamos a grabar a mitad de enero para salir al aire a comienzos de la temporada”.
Por último, consultado sobre su interés en participar de un proyecto que responde a un género poco transitado en su carrera, Echarri admitió que “además de poder encabezar un policial, lo más importante de un proyecto es la originalidad”. “Siempre busco que cada guión tenga un acabado lo más cercano posible a la perfección y el de «Arrebato» me interesó por la forma que propone de contar una historia: en espejo, en espiral”, concluyó el actor que protagonizó recientemente en teatro, junto a Dupláa, “El hijo de put@ del sombrero”.