►"El caso de Richard Jewell": un hombre simple en un mundo cruel
►"El caso de Richard Jewell": un hombre simple en un mundo cruel
Calificación: 4 estrellas
Intérpretes: Paul Walter Hauser, Sam Rockwell y Kathy Bates.
Dirección: Clint Eastwood.
Género: Drama.
Salas: Nuevo Monumental, Hoyts, Showcase, Cinépolis y Del Centro.
"El caso de Richard Jewell" es ante todo una gran historia, y nadie mejor que Clint Eastwood para contar una historia de esta magnitud. A los 89 años, y con su estilo clásico que mantiene a pulso firme, Eastwood se mete con el infierno real que vivió Richard Jewell, un guardia de seguridad que pasó de héroe a villano en tan sólo tres días. En 1996, durante los Juegos Olímpicos de Atlanta, explotó una bomba casera que dejó dos muertos y 111 heridos. Las víctimas podrían haber sido muchas más si no hubiera intervenido Jewell, que descubrió la mochila que contenía la bomba y fue el primero en despejar el área. Esta hazaña lo convirtió en un héroe, pero poco después, por presiones del FBI y de un medio local, fue señalado como el principal sospechoso de colocar el explosivo. Eastwood sobrevuela el cinismo del FBI y la voracidad de los medios, pero se detiene en el calvario que le toca vivir a Jewell, un tipo pueril e idealista que cree profundamente en las instituciones y el cumplimiento de la ley. El protagonista, junto a su madre y su leal abogado, ve cómo su mundo de valores se desmorona, y el director centra la tensión de la narración en ese proceso, que conmueve y cuestiona al espectador. La película levantó polémica por el retrato que hace de una periodista sin escrúpulos. Sin embargo este tema es un aspecto menor. "El caso..." descansa en la fuerza de sus personajes centrales y el trabajo de los actores, desde el eterno secundario Paul Walter Hauser (ahora protagonista) hasta los brillantes Kathy Bates y Sam Rockwell.
Carolina Taffoni / La Capital
►“Bacurau”: Brasil, entre la metáfora y la realidad
Calificación: 3 estellas
Intérpretes:: Sonia Braga, Udo Kier, Bárbara Colen, Jonny Mars.
Dirección: Kleber Mendonça Filho y Juliano Dornelles.
Género: Drama.
Sala:: Showcase
Un pueblo perdido en el nordeste brasileño, en la zona de Pernambuco, está aislado de todo. Sin agua potable, tampoco alimentos y encima tiene que soportar que a veces venga un candidato político a asegurarles que pronto llegarán las soluciones, cuando todos saben que es otra mentira más. Kleber Mendonça Filho, el mismo director de la brillante “Aquarius”, vuelve ahora en compañía de Juliano Dornelles para hacer un retrato distópico de un Brasil futurista, con cierto aroma apocalíptico, donde los villanos están muy estigmatizados y los nativos se retratan con traje de héroes. Quizá ese trazo grueso es el único pifie del realizador, que así como en “Aquarius” la tuvo a Sonia Braga como nave insignia, aquí volvió a convocar a la actriz de “Doña Flor y sus dos maridos” y no falló. Ella es una médica, que está en pareja con una mujer, y es una referente del pueblo y de la resistencia, por eso no le temblará el pulso para hacerle frente a un temible líder filonazi (sólido rol de Udo Kier). La película muestra a un pueblo que perdió las esperanzas y también las reglas, donde la vida vale poco, el sexo vale mucho y la muerte está a la vuelta de la esquina. Los directores aseguran que no quisieron hacer alusión a la política represiva de Jair Bolsonaro, porque el filme fue pensado mucho antes, pero es imposible evitar la metáfora hacia la realidad actual de Brasil. En la última parte del filme hay un giro hacia el género gore, con cabezas explotadas y arrancadas del cuerpo, y antes se verá un cierto aire al Cinema Novo y a la estética de John Carpenter. Es una historia futurista, pero no tan lejana.
Pedro Squillaci / La Capital